The Neighbor [j.b.]

Capítulo 36.

Sábado.

Después de arreglar su habitación, ______ se dio una ducha. Con cada segundo que pasaba lavándose el cuerpo, menos quería ir a la casa de Emily. Salió después de la ducha, se envolvió el cuerpo con una toalla y caminó hasta su armario. La última vez que _____ había viso a Emily, ella se había sentido como una completa vaga. _____ no quería comenzar a considerarse una mujer vanidosa, porque en realidad nunca lo había sido, sin embargo, saber que Emily quería estar con Justin —porque eso era obvio— la hacían sentir muy incómoda e insegura, si le decía todo esto a Justin la iba a tachar de loca.

  Vio toda la ropa que tenía en su armario y se sintió completamente estúpida al ponerse tan esquizofrénica por algo tan cliché que era la ropa. Sacó el vestido sin tirantes color azul marino, tenía un listón en la cintura, la hacía ver más delgada y a _____ siempre le había gustado. Se puso un sostén también sin tirantes y sus pechos resaltaban por encima del inicio del vestido. Tomó sus tacones color beige, se los puso y anduvo hasta el baño, para acostumbrarse y después comenzarse a maquillar. Tomó el delineador, no se consideraba la mejor en cuanto se hacia las líneas y se vio aliviada a través del espejo al ver que ambas le habían quedado parejas en vez de retorcidas o chuecas. Le gustó el resultado de ella misma, su cabello no se había esponjado, aunque aún así ella se lo alisó un poco. _____ se desesperaba cuando éste se esponjaba de más.

  Caminó hasta el piso de abajo, el timbre sonó y Justin estaba esperando afuera. Se veía guapísimo con su polo negra y sus bermudas de mezclilla que se ceñían perfecto a sus muslos, tenía sus mocasines de piel negros puestos y sus lentes Ray-Ban ocultaban sus ojos miel.

  —Estás muy guapa, _____ —halagó mientras la cogía con una mano por su cintura y la jalaba hacia él para darle un beso rápido en los labios—. Pasaremos antes al supermercado, ¿está bien?

  —¿Qué vas a comprar? —cuestionó y lo siguió hasta su auto. Justin lo rodeó después de ayudarla a meterse y entró.

  —Emily me pidió que comprara bebidas —respondió mientras manejaba con la vista en su teléfono.

  —Ah.

  Miró hacia la ventana, el sol pegaba en sus muslos descubiertos y le comenzó a picar después de unos segundos, también le quemaba y el calor era insoportable aún dentro del auto que tenía encendido el aire acondicionado. 

  Por supuesto que Emily le iba a pedir algo a Justin con tal de asegurarse que iría a su asado. No debía pensar demasiado en ella, se repetía, Justin ya era suyo desde hace tiempo y ______ quería que eso se mantuviera así. Se calmó cuando sintió la mano de Justin posarse en su muslo dando un leve apretón.

  —Sabes que ella es una amiga, ¿cierto? —le dijo él, aunque se puso a pensar, ¿eran amigos? No es que a Justin no le agradara Emily, sólo que la cercanía que estaba mostrando con él lo ponía muy incómodo.

  De ninguna manera él le diría a ______ como Emily se había presentado en su casa minutos después de que él se fuera de la casa de su novia a ducharse, prometiendo que iba a volver después de terminar. No pudo, Emily había tocado su puerta tres veces cuando él decidió atenderla. Dijo que se había pasado para recordarle que el día de hoy, sábado, era su asado y después pidió que trajera bebidas suficientes para sus invitados. Le mandó un mensaje a _____ diciéndole que tenía trabajo pendiente y que no podría regresar para estar con ella. No era una total mentira, si tenía trabajos pendientes, pero la estancia de Emily en su hogar se hizo un poco más larga que a Justin le dieron las ganas de decirle que se fuera de una buena vez.

  —Pues ella no quiere ser tu amiga —soltó brusca y salió del auto cuando llegaron al supermercado. Su frente se arrugó por el fuerte sol y se cubrió con una mano los ojos.