Nueva vida

540 33 3
                                    

Todo volvió a ser normal, la vida de Raptor comenzaba a tomar su color gracias a Mike y también a algunas terapias psicológicas a la que su novio lo obligaba a ir. Poco a poco comenzaba a olvidarse de Sparta, de hecho empezaba a pensar que vivía mejor sin él.

-¡Raptor apúrate!-

Gritó su novio desde la plata baja

-¡Ya voy!-

Bajó corriendo las escaleras

-Bien, ahora sí. ¡Vámonos!-

Agarro de la mano a su novio y salieron de su casa. Mike comenzó a conducir, ese día era su día especial, iban a una cita pues celebraban 4 años juntos, así es, ya han pasado 4 años desde lo ocurrido.

-¿Y a dónde me vas a llevar?-

Preguntaba alegre Raptor

-Es una sorpresa-

El camino fue silencioso pero no incómodo, Raptor se entretenía viendo lo tierno y lindo que se veía Mike a sus ojos.

-¡Listo!, Hemos llegado-

El peli rojo miraba por la ventana un enorme edificio que decía "Marki's". Estaba emocionado, hace tanto tiempo que no salía así con su novio. Los dos se tomaron de la mano, al entrar un señor de traje los atendió muy amable.

-Pide lo que quieras hoy yo invito-

Dijo Mike mientras agarraba la carta del menú

-Muy bien señor tengo dinero. No quiero que después andes pidiendo dinero para pagar tu tarjeta-

Los dos se rieron y comenzaron a ver la variedad de platillo. Duraron un rato decidiendo, un muchacho llegó a levantar su orden. Estaban esperando mientras hablaban de cosas realmente triviales como del trabajo, economía o gastos que tenían pendiente. Su comida había llegado y comenzaron a comer.

-¡Ay!, Estuvo demasiado rico-

Dijo Raptor mientras se respiraba en su silla

-Lo mismo digo-

Mike pidió la cuenta y después de pagar salieron del restaurante. El rubio seguía manejando, su día aún no terminaba, todavía quedaban muchos lugares los cuales el bajito tenía planeado, ya después sabría que hacer para pagar su tarjeta.

-Estoy seguro que a dónde vamos te va a encantar-

Esas palabras hicieron que Raptor se emocionara mucho más. Llegaron a una tienda de Mangas, el paraíso para el pequeño Otaku. Cuando bajaron del auto Raptor no evito abrazar a su novio, quedando la cabeza de Mike en el pecho del mayor.

-¡En verdad te amo Mike!-

Esas palabras hicieron sonrojar a más no poder al rubio

-Yo...yo también te amo-

Los dos se abrazaron, duraron muy poco pues Raptor estaba realmente impaciente por visitar aquella tienda. Mike mentiría si dijera que los precios no le parecían caros.

-¡Mike estoy tan feliz!-

Pero para él no era tan feliz, los precios realmente le dolían a su pobre tarjeta de crédito. Después de todas las comprar que había hecho su novio volvieron al auto y retomaron el camino.

-¿Hay más?-

Preguntó el peli rojo

-Sip, aún queda un último lugar-

Rapto se estaba agotando, fue un día muy movido pero obviamente disfruto eso. Mike sabía que a su novio le encantaba los juegos mecánicos y justo ese mes había ido la feria que siempre se pone cada año.

-¡Sí!-

Gritó eufórico

-¡Ja!, Sabía que te iba a gustar-

-Mike...eres el mejor novio que podría tener-

Dicho eso se agacho para darle un dulce beso francés. Mike estaba demasiado sonrojado, tanto que hizo reír a Raptor. Los dos pagaron sus entradas y vieron la gran variedad de juegos mecánicos que había, el peli rojo se quedó con los ojos abiertos, parecía un niño, por esa noche los roles de cambiaron, Mike cuidaba a Raptor quién volvió a tener 15 años.

-Si que te estás divirtiendo-

Dijo el rubio algo agotado

-¡Obviamente!-

Raptor estaba prácticamente arrastrando a su novio por toda la feria. Su diversión se vio interrumpida por cierta voz que hace tiempo no escuchaban.

-¿Raptor?-

La pareja buscó a la persona topando con esos ojos de color avellana. Los ojo del más alto se abrieron y su respiración comenzó a tornarse acelerada, Mike notó eso y apretó su agarre para dar a entender que él estaba ahí, que ya no tenía porque recordar el pasado.

-Hola Sparta, cuanto tiempo-

Dijo el rubio un poco incomodo

-Si...demasiado diría yo-

Raptor miraba a otro lado, no quería verlo ni en pintura. Sparta solo miraba con melancolía las manos de los dos unidad, eso lo notó Mike y para dar a entender que Raptor ya no era suyo, apretó más el agarre.

-¡Spartita!-

Una chica de pelo café llegó corriendo, vestía un vestido rojo muy apretado y pequeño junto con un maquillaje del mismo color.

-¡Hola tú!. ¿Cómo te llamabas?-

La chica se agarró del brazo del castaño

-Mi nombre era Mike-

-¡Ah claro!, Ya me acordé de ti. Jejeje-

Comenzó a hacer una cara lasciva

-Al parecer están felices-

Dijo Raptor aún con la mirada a otro lado

-Si. Pinky y yo somos novios-

-Me alegro de eso-

La atmósfera entre esos dos era muy incómoda

-¿Y tienes número telefónico?-

El tono de Raptor cambio repentinamente, giró su mirada quedando sus ojos frente a los de Sparta, en sus labios se mostraba una amplia sonrisa

-Si-

Dijo algo cortante

-Pasamelo-

Soltó su mano para acercarse a Sparta. Mike se quedó apartado junto a Pinky

-¿Recuerdas aquella noche?-

-Ni siquiera te atrevas a mencionarlo-

-Jajajaja-

Mike vio como Sparta estaba demasiado pegado a su chico, eso le molestó un poco pero por el bien de él se prometió jamás llegar a ser como fue Sparta. Después de ese pequeño encuentro la pareja siguió con su camino, pero algo no estaba normal, el ánimo de Raptor no estaba igual, se veía más cansado y más pensativo.

-¿Ya nos vamos?-

Preguntó el rubio

-Si, me parece una buena idea-

Los dos salieron de aquel lugar bochornoso y subieron al auto. Cuando Mike arranco vio como su novio ya estaba dormido, tanto esfuerzo acabo por agotarlo. Río un poco y comenzó a manejar. Al llegar tuvo que despertar al peli rojo. Los dos entraron, pero tenían demasiado sueño asi que lo único que hicieron fue ir directamente a su habitación.

→←→←→←→←→←→←→←→←
Hola gente, ¿Cómo están?, Esta es una continuación de mi historia de "Amigos No por favor", la cual me base en una canción de Yuridia.

Esta historia va a ser 100% Mikerap.

Mi nombre es Oliver y espero que te guste.

𝑬𝒔𝒕𝒖́𝒑𝒊𝒅𝒐 𝒐𝒓𝒈𝒖𝒍𝒍𝒐 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora