Del otro lado, siempre van a estar las cosas más terroríficas para la humanidad.
El otro lado, se oculta y vive en la clandestinidad.
Namjoon quiere dominar el otro lado, sin importar qué pase y quien muera.
Pero extrañamente, su vida se encuentra...
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Fue un misero y diminuto instante lo que duraron las palabras de aquella persona, nada a su alrededor parecía tener sentido alguno, las luces parpadeaban, o lo poco que se lograba distinguir de ellas.
Habian varias personas sobre él, las voces se oían lejanas, no lograba distinguir de que hablaban.
Un dolor punzante en su cabeza hizo que ejerciera presión en sus párpados.
"Taehyung"
"Taehyung"
"Taehyung"
Su inconciente le estaba advirtiendo o llamando la atención sobre algo o alguien.
"Taehyung"
¿donde mierda estaba Taehyung?
Quería levantarse, queria salir de allí y buscarlo, pero simplemente su cuerpo no respondía a sus órdenes.
Sin poder objetar, sus ojos se fueron cerrando, oía gritos a su arededor, pero luego, no oyó más nada.
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Por reflejo sus ojos se abrieron, no reconocía el lugar en donde se encontraba, le costaba demasiaso mantener la mirada con tanta iluminación.
Su cuerpo estaba demasiado adolorido y cansado, no sentía fuerza alguna, intento moverse pero sus músculos no respondieron.
Con todo el esfuerzo que tenía pudo girar la cabeza.
En ese momento, hubiese deseado no hacerlo. Al lado de la camilla en la que el se encontraba, había otra, pero sin embargo eso no fue lo que más lo inmutó, si no, que en esa camilla estaba Taehyung.
Su pequeño Taehyung.
Estaba conectado a un respirador, entubado, su rostro estaba vendado, solo se podían ver sus ojos, su cuerpo tambien estaba cubierto por esas finas vendas de color blanco.
NamJoon estaba completamente lúcido, más de lo que hubiese querido, el cuerpo que tanto le costaba mover, comenzó a tener escalofríos y comenzó a sentir sus piernas calientes, demasiado calientes.
