Hyunjin es el cantante de una banda indie que jura amor eterno a su novio, Felix. Pero parece que siete años después, las cosas ya no son lo mismo.
Ahora Hyunjin tendrá que salvar a Felix de su oscuro destino.
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× Adaptación
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Felix estaba en su casa trabajando en la nueva canción, el teclado y la laptop estaban a su lado, ayudándole en el proceso. De repente el timbre de la puerta sonó y se detuvo algo extrañado, ¿quién sería tan temprano? Aún hasta llevaba la pijama.
Cuando abrió la puerta, Hyunjin estaba al otro lado y se veía intranquilo, Felix lo vio con asombro y el más alto de inmediato lo abrazó con fuerza y desespero.
-Gracias a Dios estás vivo...-susurró apretándolo aún más fuerte. Felix se quejó un poco.
-Hyung... ¿qué sucede? ¿Tuviste una pesadilla? Claro que estoy vivo -al menor le daba algo de ternura lo desesperado que su novio se veía ahora mismo por un mal sueño, es que lo abrazaba tan fuerte que hasta dolía un poco.
-Ojalá haya sido una pesadilla- Hyunjin subió una mano hasta los cabellos castaños y los acarició mientras aspiraba el olor del más bajo.
Felix terminó sonriendo y lo abrazó de vuelta, dándole unas palmaditas en la espalda muy suaves, como consolándolo- ya, ya, solo fue una pesadilla, seguro es que te sientes culpable por lo que dijiste ayer.
El pelinegro se separó y le agarró el rostro con ambas manos, mirándolo de pies a cabeza- en verdad estás vivo.
Ambos ingresaron a la casa, Hyunjin fue directo al cuarto de su pareja mientras este se cepillaba los dientes con una sonrisa, la inesperada visita le había hecho palpitar el corazón.
El cantante agarró una maleta de equipaje y comenzó a buscar ropa en el armario de Felix sacando varias camisetas y pantalones para meterlos allí.
-¿Y esa maleta? -El castaño al fin había terminado de lavarse los dientes y se encontró con la extraña escena de su novio empacando.
-Nos vamos de viaje -fue la única respuesta que obtuvo, cosa que lo confundió aún más, pero sonaba bien, un viaje juntos podría ser emocionante.
-Por cierto, pasé la noche escribiendo una nueva canción -comentó con una suave sonrisa, se sentía feliz de poder mostrársela antes que a los chicos.
-La canción no es importante, mejor alístate pronto -Hyunjin respondió aún concentrado en empacar cosas en la maleta, sin alcanzar a ver el cambio de expresión en el rostro de Felix.
-No es importante...-el castaño susurró agachando la mirada mientras apretaba los labios.
Después de esto ambos terminaron sentados en un auto que había traído Hyunjin, a pesar de que Felix le había dicho que no entendía nada, Hyunjin solo le dijo que no importaba. Era tan extraño el comportamiento del mayor con todo esto del repentino viaje, y se veía muy tensionado, sus nudillos estaban blancos de lo fuerte que apretaba el manubrio, además que estaba inusualmente callado mientras manejaba.
-¿Hasta cuándo me vas a dejar sin saber? -Felix rompió el silencio muchos minutos después.
