Durante aquel beso sentí que los labios de Nunew eran suaves y adictivos.
— Nunew...—suspiré víctima de aquel placer.
— Hia...— me susurró al oído, provocando aún más descargas en mi por aquel tono y manera de llamarme— ¿Vamos a otro lado? — yo no era la clase de chico que diría "si" luego de unas horas de conocerlo, pero él era tan distinto. Yo había salido con otros chicos y hasta con una o dos chicas, en mi vida. Pero ¿Cómo podía provocarme esto este niño que acababa de conocer?
Con aquellas dudas ya nos encontrábamos en el cuarto de un hotel. Con los boxers como únicas prendas, mientras me aferraba a su cintura, rozando nuestros miembros descontroladamente.
— Ahhh Hia ....—sus gemidos me invadían, se apoderaban de mí ser. Deseaba estar en su interior, embistiendo aquel delicado y blanco cuerpo. Quería ver ese rostro bellísimo sonrojarse y gritar de placer. Había acariciado su cuerpo, besado todo lugar existente en él. Había sentido sus caricias y sus magníficos toques.
Besando su pecho lleve dos dedos a su boca, sintiendo aún más descargas, mientras él los humedecía. Regrese a apoderarme de su boca mientras él se deshacía de los bóxers de ambos para luego terminar juntos sobre la cama.
Abrió sus piernas aún más, dando lugar mis dedos, que acariciaron suevamente su entrada. Noté, al intentar ingresar el primer dedo, que aquella cavidad era realmente estrecha.
— Nunew...— murmuré separándonos del beso—¿Acaso tú...?
—Sigue por favor, Zeenie — me interrumpió con aquel diminutivo tan inesperado, rodeándome el cuello y llevándome hacia sus labios una vez más. Mientras movía mis dígitos en su interior, la duda seguía en mí. No, ya no era una duda, podía asegurar que Nunew era virgen.
Saqué mis dedos una vez que lo noté lo suficientemente excitado y me acerqué con cuidado a su entrada, ingresando de a poco mi miembro en él. Veía como tiernas lágrimas caían de su ceño fruncido, y su respiración se cortaba cada tanto.
— Dime si quieres que me detenga...— le susurré con voz tierna besando sus mejillas.
— Está bien, puedes seguir...— su carita me daba tanta pena, era tan tierno. No quería causarle más dolor.
Una vez dentro de él seguí apoderándome de sus labios, su cuello, su pecho, sus hombros. Mordía, lamía, succionaba todo lo que había a mi alcance. Sentí como comenzaba a mover sus caderas en busca de placer, y obviamente se lo concedí. Comencé a dar suaves estocadas en su interior, conmovido por la imagen de mecerlo bajo mío, con sus mejillas rosadas y aquel vaivén que movía nuestro cabello dando una imagen tierna y sensual. Pronto llego el momento de aumentar el ritmo, de dar más placer a sus sentidos.
-Más, Zee, por favor...- gemía clavando sus manos en mis hombros- Mmmmh más...
Seguía embistiendo ese punto que hace poco había encontrado en él, sus gemidos provocaban los míos.
— Nunew...Ahhh New... su nombre salía de mis suspiros, mi cabeza se encontraba en su hombro, intentando sostenerme con mis antebrazos. Era imposible, el placer que me invadía jamás lo había sentido.
— Zeenie...— ronroneaba de forma tierna, excitado —Así...mmmh seguí, ahí...
— ¿Te gusta? — susurré con una sonrisa de lado y tono maléfico.
—Sí, quiero más, mngh...—sus gemidos eran exquisitos y el tono en sus mejillas lo hacía ver mucho más precioso. Comenzó a gemir más alto en cuanto aumenté el ritmo. Tomé su miembro con mi mano y comencé a masturbarlo al ritmo de nuestros movimientos. Clavó sus dedos en mi espalda y arqueo la suya en un último y sonoro gemido, para luego sentir su dulce esencia resbalar por mi mano. Su cuerpo se contrajo provocando que en dos estocadas más lo marcara como mío. Y qué bueno que fue pronto, porque si notaba que aún me faltaba hubiera salido de él, ya no quería darle más dolor del que había sentido.
Me dejé caer sobre su pecho y me acurruqué aun si yo no era el menor, solo deseaba quedarme sintiendo un poco más lo cálido que se sentía el cuerpo de Nunew. Él enredo sus finos dedos en mi cabello, mientras con su otra mano acariciaba mi espalda.
—Hia...— susurró luego de un rato.
— ¿Mmmh? — no quería salir de ese estado de ensoñación que sentía sobre su cuerpo.
— ¿Me dirías algo lindo? Aunque fuera mentira — me incorporé algo extrañado, sus mejillas color carmín me decían que no quería que lo mirase a los ojos en ese momento. Me recosté a su lado, apoyado en mi antebrazo para poder mirarlo cómodamente.
— ¿Por qué quieres que te mienta?
— Porque quiero escucharte decirme cosas lindas...— dibujo un puchero en sus labios.
— No necesito mentir para eso...— concluí depositando un pequeño beso en su mentón.—Eres muy hermoso...—acaricie con el dorso de mi mano su delicada y suave mejilla, me sentía cursi, pero las palabras salían solas de mi boca.
— ¿En serio?—sus ojitos se veían aguados, ¿Por qué?
— En serio...—le devolví la sonrisa y besé su mejilla —Tu cuerpo es hermoso, lo amo...—susurré con mis labios pegados a su piel.
— ¿No crees que estoy algo gordito?— me miró fijo llevando sus manitos a su estómago. Quité la sábana que cubría su torso y apoye mi mano en su vientre.
—Deja de decir estupideces — dije en un tono juguetón, baje hasta su pequeño estómago y comencé a depositar besos tiernos, nada insinuante, sentía como se retorcía de las cosquillas mientras mis labios seguían amando su piel.
— Gracias, Hia...— acarició mi cabello con ternura, volví hacia él depositando un dulce beso en sus labios. Nos besamos así durante un rato, lenta y apasionadamente. Un masaje sensible y cargado de cariño.
— Nunew...Quiero saber...— Tomé su cintura y lo traje más hacia mi—¿Cómo es posible que te quiera tanto? ¿Qué hiciste conmigo en tan poco tiempo? — llevé mis labios a su frente. Cuando me separé de él note que sus ojitos se habían aguado de nuevo. En ese momento no lo creí importante, acaricié su cabello hasta que el sueño y el cansancio se apoderaron de él.
Era hermoso. Jamás hubiera creído que podía existir chico tan hermoso en este universo...tanto físicamente como en su tierno interior. Me costaba creer que hace minutos ese cuerpo había sido mío, solo mío.
Salí de la cama en busca de mi mochila, saqué un cuaderno y mi lápiz. Y bueno, soy artista, siempre llevo una hoja a donde vaya. Mientras dormía intente capturar a la perfección su presencia. Fue extraño, quizás...ya sabía lo que ocurriría. Quizás dentro de mí lo presentí, y mi corazón necesitaba recordarlo por siempre.Luego de una siesta salimos del lugar aun tomados de las manos, a lo lejos parecía comenzar a amanecer. Llegamos hasta la parada del autobús donde nos despediríamos. Nos sentamos en la banqueta a esperar.
— ¿Te veré de nuevo?— esa pregunta fue casi inconsciente. Mi corazón la susurro, pero mi boca la gritó. Necesitaba saberlo.
— Zee ¿Tienes un marcador? — preguntó tiernamente apoyado en mi hombro. Busque entre mis cosas, pero nada. Solo lápices. —¿Me prestas tus llaves? —algo confundido se las extendí.
Tomó aquella que corresponde al candado de mi bici, se agachó y comenzó a tallar el banco de la estación, quitando la pintura que le quedaba, hundiéndose en ese color oxido. Me incliné un poco para ver como remarcaba nuestros nombres.
— ¿Y eso? — pregunté con una sonrisa al ver su rostro de felicidad.
— Si te acuerdas de mí debes leerlo, así pensaremos en cosas felices que hayamos pasado juntos— me sonrió con aquellos labios bonitos, que pronto se unieron a los míos. El autobus se acercaba. Sentí como me abrazó con fuerza y se despidió.
Seguramente lo vería en unos días. Sí, el fin de semana que viene quizás se repitiera lo de hoy. Aunque con este sensual chico...me gustaría tener citas tranquilas, sanas e inocentes. Era quien más me encendía, lo sé...pero también era con quien deseaba hablar por horas.
Aquí estoy hoy, en esta misma parada del autobús, rozando con mis dedos nuestros nombres tallados años atrás. Tenía razón, cuando viniera recordaría todos los bellos momentos que pasamos ese día, como lo hago ahora. Y poco a poco, el odio que llevo dentro desaparece, se anula por un momento. Es como si, en cierta forma, te entendiera.
Porque me relaja estos tiempos en los que mi corazón se anula y no siente, se olvida del sufrimiento...el sufrimiento que viví aquel día, semanas después de haberte conocido.
Si, era mi entrega de diplomas, mi fiesta de egresado, al fin había terminado mi carrera
Quería invitar a Nunew, pero me daba algo de vergüenza preguntarle a Net, después de todo, parecía algo decaído cuando yo me acercaba.Entre saludos y felicitaciones, pude ver a Net junto a James en un rincón. Me acerqué a saludarlos, me habían estado esperando y ambos me felicitaron tan efusivamente, una vez que terminó la emoción, carraspeé para llamar de nuevo la atención de ambos.
— Net ¿Sabes algo de Nunew?— pregunté ya sin importarme la vergüenza, con unasonrisa alegre de al fin poder sacar algo de información.
— Ah...—el rostro de Net se tornó triste — Nunew...se mudó al centro con su novio,se comprometieron.— seco. Frío. Quizás no, pero así lo sentí. Un balde de aguahelada que descendía por mi espina dorsal. La sonrisa que tenía hace segundosno se quitaba de mis labios. Tal vez por el shock, olvidé borrarla.
— Cu... ¿Cuándo fue eso? — interrogué queriendo sonar normal.
— Al día siguiente de nuestra cita— finalizó para terminar de apuñalar micorazón.
¿Acaso me había usado? ¿Había sido yo su fiesta de despedida de soltero?
No comprendía nada...Era solo un pendejo infiel.
Tiré mi lazó al suelo con furia bajo la mirada asustada de mi mejor amigo. Me quitéaquella túnica molesta y corrí lejos. No quería llorar, pero la furia y eldolor se enredaban en mi garganta.
Agitado me apoyé en mis rodillas, y me senté en el borde de la vereda. Sujetémi cabeza con irá, intentando recuperar el pulso y desanudar mi corazón.
— P'Zee... — ¿Cómo pudo Net seguir mispasos? Se lo veía aún más agitado que yo. — Esto...es algo que no deberíadecirte...— continuó.
— Pues no me lo digas— solté — No me digas nada que tenga que ver con esetraidor
— Nunew no es así...
— Nunew estuvo conmigo esa noche — acoté para la sorpresa del pelinegro — Meusó y luego fue a comprometerse ¿Eso te parece que está bien? — lo miré alos ojos, sentía como mi visión se nublaba debido a las lágrimas— Me uso a mí yengañó a su novio...
— No es eso...— suspiró — Nunew debía comprometerse con él...— soltó al aire, sinmirarme —Así que me pidió que arreglara esa cita.
Ese momento sentí una opresión en mi pecho. Ahora creo entenderte un poco más.Sigo delineando tu retrato con mi dedo, intentando creer que mis caricias tellegan. Porque en ese banco lo recuerdo, la cita que armaste para estarconmigo, para conocerme, para despedirme. Aunque fuese solo un día, una hora.Porque yo era...tu primer amor.
Llegaste como un sueño...y como un sueño te fuiste.
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Apenas andamos comenzando y ya hay que abrazar a Zee ;;
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FIRST LOVE [ZEENUNEW]
RomanceJames le pide a Zee, su phi favorito, que lo acompañe a una cita doble. Zee accede sin saber que terminara conociendo a alguien demasiado especial. Género: Drama Romántico, Lemon, broken Clasificación: NC-17 Comentario de adaptadora: Este fanfic NO...