Endemoniado amor

Especial Halloween 1

Aquel pilar de cabellos rubios y mechones rojizos al igual que el fuego estaba caminando por un bosque, la luz de a poco comenzaba a desvanecerse dando la llegada a la noche; pese a seguir manteniendo su clásica sonrisa que demostraba y contagiaba confianza hacia cualquiera que la viera en el fondo el pilar se encontraba algo decaído. Esa noche era la noche de halloween y le había prometido a su hermano que saldría con el disfrazados, pero ahora que había sido llamado para una misión estaba preocupado de no poder cumplir su promesa y que su hermano pequeño se quedara todo el día cuidando a su padre. A veces sentía algo de pena por su hermano y sentía que le dejaba demasiada responsabilidad

— (Desde que nuestra madre murió nada fue igual... Antes nuestro padre nos acompañaba a pedir dulces pero ahora... Solo bebe alcohol y el pobre de Senjuro debe de cuidarlo)

Pensaba el pilar mientras seguía adentrándose mas a aquel bosque, aun sin éxito de encontrar ningún indicio de que algún demonio estuviera cerca

— (Pero no dejare que Senjuro siga sufriendo, yo como hermano mayor me encargare de que viva de manera feliz así como yo tuve la fortuna de hacerlo)

Se dio animos una última vez haciendo que su sonrisa regresara a la normalidad. Pero después de casi una hora de recorrer todo el bosque no había logrado encontrar a nada ni nadie, pese a que sentía un para de ojos que parecían observarlo desde las sombras no había nada que le confirmara sus sospechas «Quizas estoy pensando demasiado, o tal vez estoy nervioso por ser halloween» pensó seguido de una risa al pensar en todos los cuentos que escuchaba de pequeño y que en su momento le intrigaban y asustaban, haciendo que durante la noche le fuera difícil dormir

— Bien, si me apresuro aun puedo llegar con Senjuro

Y así, después de abandonar aquel bosque correría hasta su casa; claro, al ser un pilar no le tomaría demasiado tiempo en llegar, y ahí, en la casa de la familia Rengoku ya estaba el menor de los hermanos colocándole los últimos detalles a su traje. Rengoku al ver eso no podría evitar sonreír de manera nostálgica, le hacia feliz ver a su hermano sonriendo y emocionado por algo

— Hermano... Que te parece?... Padre dice que no debería celebrar el día de hoy y que el traje se ve ridículo...

Hablo Senjuro con una voz algo tímida y una leve sonrisa tratando de disimular que el comentario que había hecho su padre durante el día le había afectado. Kyojuro ante esto solo pondría sus manos en cada hombro de su hermano al mismo tiempo que se ponía de cuclillas mostrándole una sonrisa cálida

— No te preocupes por lo que nuestro padre diga, recuerda que quien es dueño de su vida eres tu mismo, y mientras vivas con orgullo todo habrá valido la pena

Pronuncio el pilar con voz segura para seguidamente abrazar a su hermano durante unos segundos, pues los ojos del menor ante dichas palabras se habrían cristalizado dejando ver unas lágrimas sobre los mismos. Una vez ambos hermanos se separaron de aquel abrazo el pilar se pondría de pie aun sin despegar sus manos de los hombros de su hermano

— Bien, iré a cambiarme, no tardare

Hablo con una sonrisa para después dirigirse a uno de los cuartos y cambiarse, su traje era idéntico al de su hermano, pues así habían acordado entre ambos en salir. Una vez que salio de la habitación ya listo su hermano al verlo sonreiría nada mas verlo, nunca había podido experimentar lo que era celebrar ese día pero ahora gracias a su hermano mayor podría y se aseguraría de disfrutar cada momento junto a su hermano

— Bien! Vámonos, no queremos que se nos haga mas noche no es así?

— Si hermano

Y asi, ambos hermanos saldrían de la casa Rengoku en busca de algunos dulces