Una carta de estrellas y rosas (Extra Halloween)📜

49 12 126
                                    

—Vamos Theresa, llegaremos tarde —la llamo

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

—Vamos Theresa, llegaremos tarde —la llamo. Ella me grita que le falta poco para estar lista.

Me siento de nuevo en el sofá de la sala.

Mientras espero, converso un poco con Elías, el hermano mayor de mi estrellita. Me cuenta un poco acerca de la cita que tuvo anoche, y yo le doy algunos consejos para la próxima.

—¿De qué se supone estás disfrazado? —pregunta luego de algunos segundos en silencio, cambiando el tema.

—Soy Milo.

Se queda mirándome.

—El de Atlantis...

No se mueve.

—... La película de Disney...

Hace una mueca de incertidumbre, levantando una ceja.

—No puedo creer que no hayas visto esa película Elías —casi le grito, indignado—. Es maravillosa. Creo que es una de mis películas favoritas de la vida. Más personas deberían conocerla. Es...

—De acuerdo, de acuerdo —me interrumpe—, ya entendí. Te encanta la película.

»¿Y Theresa? ¿Sabes de qué se disfrazará?

—No quiso decírmelo.

—Porque eso arruinaría la sorpresa, amor —dice una voz de repente, una voz que logra mandar una corriente eléctrica a todo mi cuerpo.

Volteo la cabeza para ver a mi estrellita. Está disfrazada de Kida. Se puso una peluca, y también lentes de contacto, para parecerse más, físicamente, al personaje.

Es hermosa.

Termina de bajar las escaleras y yo me levanto para llegar hacia ella mientras que Elías se queda sentado en el sofá. Él no está disfrazado porque se quedará a cuidar a Eden, el hermano pequeño de Theresa, esta noche.

En cuanto está frente a mí no soy capaz de ver algo más. Ella es todo lo que puedo ver, y no solamente porque está disfrazada de mi crush desde que era un niño pequeño, sino porque es ella. Es como una estrella brillante que logra iluminar la oscuridad que sumía al mundo. Es como esa pequeña llama que ilumina las noches en las que la luz no quiere encenderse.

Es el amor de mi vida.

—¿Y? ¿Qué piensas? —dice con una sonrisa. Tiene una sonrisa tan única que jamás sería capaz de describirla correctamente. Ninguna palabra parece hacerle justicia.

—Yo... T-Tú... Wow.

No soy capaz de decir nada más. Simplemente me he quedado sin palabras.

—Tomaré eso como un cumplido.

—Deberías —logro decir—. Te ves hermosa, estrellita. Yo... No puedo creer que estés enamorada de mí. Soy el hombre más afortunado del universo. Me quedo corto. Soy el hombre más afortunado de todos los universos.

Every Night [#1.5] [Español]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora