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Aquí establecimos nuestro club hace un par de meses... - respondió el chico sonriendo

El club de qué? - preguntó el hombre de traje mientras escaneaba el lugar

De los faceless- dijo cruzandose de brazos en un afán por parecer el más ingenioso hombre de la tierra

Todos se miraron y dejaron salir una carcajada que llenó el lugar por completo, aplastando dirías tú un poco su ego...

-Es lo más ridículo que he escuchado-dijo el taxista mientras limpiaba sus lágrimas ahora de risa

-y cuántos integrantes tiene tú club-dijo el de corbata tratando de callarnos con su dedo en los labios expectante de la nueva "tontería" que diría el chico

-dos, pero-interrumpido de nuevo por las estruendosas risas fue jalado a un lado por la chica de naranja...

Vamonos- trató de convenserlo

Retirando su mano prosiguió - Tienen un buen sentido del humor no? -

-Eres increíble niño.
Deberías ser comediante.
Deberías mejor ir a estudiar- dijeron todos en orden

-Pues creo que deberían unirse- con un tono serio nos miró. Los hombres rieron nuevamente pero tú quedaste pensativ@ al ver su determinación... Qué está tramando esta persona?..

-Jaja, tienen razón amigos, quién querría unirse a un club tan "ridículo" no?, suena para niños- dijo el chico- ya que todos están tan bien posicionados en el mundo no?, no es cierto taxista?, que vives cómo dijiste "la vida de otra persona" -

Cambiando rápidamente su humor el hombre lo miró con resentimiento.

-y tú empleado-se dirigió al hombre de la corbata-no es difícil pensar que el estrés que sientes es por que estas haciendo algo que no debes en la empresa que trabajas- sonrió sarcásticamente

Acomodando su corbata se podía escuchar como tragaba fuertemente

-Y tú, por qué estarías consolando a un hombre que no conoces en medio de la nada?, tratas de ser un@ buen samaritan@ realmente? -

De nuevo el silencio pesado inundó el ambiente...

-Qué quieres de nosotros chico- dijo el de corbata

-El club de los faceless tiene pocas reglas pero muy específicas...

Regla número uno
Nadie sabe su pasado o presente.
Regla número dos
Nadie le dice qué hacer al otro ni pregunta cosas que no le incumben.
Regla número tres
Nadie conoce el nombre del otro.-

Todos lo mirában atentos...

-Es un club de desahogo, no hay límite de edad ni género , así que personas como ustedes serían, a mi parecer, los mejores candidatos... Dijo frunciendo su seño mientras levantaba los hombros y los dejaba caer con una sonrisa altiva...

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⏰ Última actualización: Nov 01, 2022 ⏰

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