•• Dérive ~ Laliter ••

Capítulo 8

Narra Peter

La cabeza me da vueltas, no consigo entender porque fui tan tonto de hacerle caso a Candela de venir a ver a Lali e intentar firmar la paz entre los dos. Camino despacio dirección hacia el set, llegaba con tiempo de sobra así que me siento en un banco, apoyo mis codos en mis rodillas, cubro con mis manos mi nuca y miro hacia el suelo.

La espuma del café se iba disolviendo a medida que lo movía con ligereza esperando la llegada de Cande a la cafetería que ella misma había elegido, bastante lejos, la verdad. Mi pie golpeaba el suelo con insistencia a causa de los nervios realizando una pequeña melodía. No sabía de qué íbamos a hablar, la conocía desde que éramos unos críos pero después de todo lo ocurrido no sabía qué conversación mantendría con ella.

Una chica con el pelo revuelto por el viento que esta tarde nos acompaña, entra intentando peinarse para no parecer una loca. Candela me observa desde la entrada y saluda llamando la atención de todos los allí presentes. Antes de llegar hacia mí, pasa por la barra para pedir su café sin cafeína tan característico. Siempre dice que es demasiado nerviosa como para encima tomar cafeína. El chico de la barra le sonríe y le promete llevarlo a la mesa en cuanto esté preparado.

- ¿Qué tal? - me levanto para darle dos besos y ella acaba colgada de mi cuello dejándome sin aire. Ese aroma a frutos y rosas que siempre usaba.

-Echaba de menos tus abrazos, Osito - me dice sonriendo.

- No me vuelvas a llamar osito, por favor - intento ponerme serio pero ella comienza a hacerme cosquilla y mi semblante cambia sacando la mayor de las sonrisas. Tenía ante mí a mi amiga, la chica que había estado en las buenas y en las malas. Pero desde que rompí con Lali algo cambió entre nosotros. Dejamos de escribirnos y poco a poco se fue muriendo la relación, hasta que un día el destino volvió a juntarnos hace un año y sin decir nada, todo volvió a ser como era antes. Ellas eran uña y carne y no la culpo porque se quedara con ella. Cualquiera que conociera a Lali tanto como Cande, se quedaría toda la vida con ella, yo siento que me faltaron cosas por conocer, o eso pienso.

- Pitt te he echado de menos aunque no me creas eh.

- Te creo, te creo - si no le daba la razón me seguiría propinando cosquillas con sus dedos finitos y acabaría soltando alguna carcajada.

- Siéntate - diría que casi me obliga a que lo haga con la mirada que clava en mi. Obedezco y ella me toma de una de las manos que tengo encima de la mesa mientras el camarero deja su café sobre esta - No sé como empezar - mira a todos lados. - Mira no le voy a dar más vueltas y tampoco quiero quitarte mucho tiempo porque tendrás cosas que hacer. Sé que vamos a volver a trabajar juntos y me alegro muchísimo, de verdad te lo digo, pero también sabemos que es Lali la chica con la que vas a volver a tener un "romance" en este nuevo proyecto - puedo notar como le comienzan a sudar las manos, le pasaba cuando estaba muy nerviosa. Ella sabía mucho de lo que pasó años atrás, es más, la versión de Lali se la tenía que conocer enterita.

- A ver Cande, ya sé que es ella, como también sé que tenerla cerca no me va a suponer ningún problema porque hace ya diez años que todo eso pasó, esta más que olvidado - la miro intentando calmar su nerviosismo pero es imposible.

- Pitt, Lali lo pasó muy mal, ella sufrió muchísimo cuando descubrió que era cierto que Martina y tú sí estuvieron saliendo, y eso que tu a ella siempre se lo negaste - traga saliva - ella te quería.

- La amaba, y te juro que estando juntos jamás la traicione con nadie, era incapaz de hacerle algo así a la persona que me enseñó a amar por primera vez. - aprieto su mano que aun me agarraba con fuerza. - Lali lo fue todo para mi.