⁰⁵

1.9K 143 5
                                    

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


   Narrador omnisciente

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


  Narrador omnisciente.

El avión del pelinegro había aterrizado hace media hora, este se encontraba arreglando su nueva habitación. Seguía confundido con respecto a lo que pasó con su ahora ex novio, aunque por dentro se negaba a que sea así.

  Todo el vuelo estuvo pensando acerca de qué fue lo que ocurrió entre Nayeon y Jimin, por qué éste no quería decirle nada al respecto, porque sí; notó que había algo más que él no sabía, pero decidió darle el beneficio de la duda a Nayeon.

  Primeramente intentaría comenzar con sus ensayos, hablaría con el señor Im y se adaptaría a su nueva vida, con el transcurso de los días vería si realmente ocurría algo con Nayeon, si la chica demostrase que puede confiar en ella, entonces intentaría hablar con Jimin nuevamente para aclarar y arreglar las cosas.

  Si el rubio siguiese insistiendo con respecto a la chica, entonces aceptaría las cosas, se daría por vencido con su relación. Por el momento se encontraba situado en el medio, sin saber qué hacer.

  Soltó un suspiro agotado al terminar de acomodar sus ropas en el clóset y tomó una toalla para meterse a bañar. En un par de horas más conocería al padre de Nayeon.

  Estaba ansioso apesar de que la chica le había aclarado que sin importar cómo saliese la audición, él pasaría porque ella le aseguró un puesto. Por un lado le aliviaba ese hecho, pero por otro lado le hacía sentir mal pensando que él no estaría consiguiéndolo de forma justa, que lo conseguiría por intervención de terceros y no por méritos propios. Intentaba no pensar mucho en ello.

  Terminó de restregar su espalda y salió de la bañera tomando su toalla para atarla a su cadera, salía distraídamente del baño cuando escuchó un jadeo. Con miedo se giró hacia donde había sonado este y ahí se encontraba Nayeon.

  - ¡Oh, por Dios! ¡Lo siento! — se tapó los ojos chillando falsamente, hecho que pasó desapercibido para Jungkook. — Te estaba buscando porque mi padre ya está esperando para conocerte.  — se excusó.

  - ¿Ya? Creí que nos veríamos en un par de horas. — respondió incómodo intentando tapar su desnudez con un par de frazadas que estaban en el clóset.

  - Sí, pero más tarde estará ocupado, así que quiso adelantar el encuentro. — murmuró mientras intentaba observar entre sus dedos a Jungkook, este estaba totalmente distraído intentando taparse que ni notó la mirada ajena.

  - Hmm, bien. Me visto y salgo, ¿sí?

  - Claro. — sonrió y se giró, no sin antes volver a echar un vistazo al cuerpo del pelinegro. — Te espero en el lobby. —

  La pelinegra salió de la habitación ajena con una sonrisa plasmada en el rostro, era obvio que su padre no estaría ocupado más tarde, pero necesitaba una excusa para poder entrar al cuarto del pelinegro. Con una sonrisa triunfante se dirigió hasta el lobby para esperar que el guapo chico terminara de vestirse, aún sin poder borrar de su cabeza la imagen de sus abdominales.

Only me • kookmin auDonde viven las historias. Descúbrelo ahora