Mordidas : sookai

O4

HueningKai no comprendía del todo los cambios que pudiese tener SooBin, siquiera la razón de ello. Un par de veces había sido por el aroma que en el había, de lo cual aún no comprendía como SooBin lograba sentirlo, otras veces por irse mucho tiempo y no avisarle y otras veces había llegado a –en su forma animal– lanzar algunos adornos al suelo cuando llegaban sus amigos. Quería comprender a el mayor, pero el lo único que podía llegar a decirle es que luego se lo explicaría, pero desde que el había llegado a su departamento ya había pasado un poco más de ocho meses y aún no le decía absolutamente nada. No le molestaban los adornos, podía comprar más luego, no le molestaba tener que cambiarse de ropa luego de estar con ciertas personas, no le molestaba tener que darle más de una explicación, pero comenzaba a frustrarse al no poder comprender a SooBin.

HueningKai había decidido cerrar con seguro la puerta de su habitación, mientras el enojo de el mayor desaparecía. Mala decisión, y muy mala. SooBin decidió entrar por la ventana de la habitación, para luego mirar a el menor, quien se sentó en su cama al verlo parado frente a el. El menor iba a decir algo, pero SooBin habló antes de que las palabras pudiesen salir de su boca

— Lo siento —HueningKai cerró su boca, mirando a el mayor— Lamento todo lo que hago, lamento compórtame tan mal contigo, lamento ser así —El menor quiso decir algo, pero SooBin alzó un poco su mano, para que esperará un poco— Pero necesito decirte que cuando un híbrido elige a su pareja, es totalmente imposible que las cosas se tornen muy buenas si no pueden decirlo —HueningKai frunció un poco el ceño y miró el suelo

— ¿Me... tú me escogiste a mí? —Miró a el mayor, quien asintió y apretó sus labios. HueningKai sonrió, no sabía que debía decir en ese momento— ¿Por qué?.

— Realmente no lo sé, sólo que cuando te vi por primera vez sentí muchas ganas de estar contigo, quería cuidarte y protegerte, sentí como mi corazón latía con fuerza y me sentí realmente feliz cuando vi como sonreías —Kai sonrió nuevamente, para acercarse a el mayor y abrazarlo.

— Lamento haberte mordido, era la única forma de sentirme bien conmigo mismo al saber que de algún modo u otro te reclamaba —HueningKai rió y se alejó de el mayor

— Supongo que está bien —SooBin le sonrió.