Una historia de amor.

Soledad, celos y la verdad.

Cata y Vicente llevan casi dos meses de pololeo, pero las cosas han cambiado últimamente, cata lo siente más distante, ya no es como era a principios de la relación, aveces con suerte hablan porque el esta ocupado o con sus amigos, ya no salen como antes y ya no van a las casas del otro, todo a sido más oscuro y distante estas últimas semanas. Cata ha empezado a sentir celos de las amigas de Vicente, porque se nota que pasa más tiempo con ellas que con cata, esta bien, pero también para que hablan ahora cata le tiene que hablar o sino no hablan durante todo el día, estos hechos han entristecido a cata haciendo que su mente se ponga en contra de ella y piense cosas que no son y le dan ganas de hacer cosas que no debe y luego se arrepiente, no le ha dicho nada a Vicente ya que no quiere que terminen como la primera vez.

Era un día martes en la hora de artes visuales, estaban dibujando y cata ya había terminado el trabajo, así que pensó en dibujar lo que sentía ya que no sabía si decirle o no las cosas que pasaban por su cabeza para que no discutan y no terminen.

Vicente la noto rara, gracias a Dios que con suerte la miro🙌, fue hacia ella y le preguntó que le pasaba.

-Oye, cata -nisiquiera una palabra de cariño, tenía que decir cata.- ¿éstas bien? Es que te noto rara.

-¿Podemos hablarlo después? Necesito decirte algunas cosas pero no acá, aparte estoy cansada.- dijo cata sin mucho interés por la cosas que pasaban por su cabeza.

-Esta bien.- Dijo Vicente hablando como desinteresado por lo que le pasaba y poco preocupado por lo que le va a decir cata.

Cata estaba preocupada, sentía como si su subconsciente estuviera en otro lugar, algo que nunca había sentido, escuchaba muchos ruidos en su cabeza como de murmullos, ambulancias y las ruedas de alguna camilla de algún hospital, se sentía tan rara y estresada, se podía notar con solo mirarla como cerraba los ojos con fuerza y tocaba su cabeza pasando los dedos entre su cabello como si tuviera dolor de cabeza, para eso se tomó una aspirina esperando que se le pasara, pero no fue así, siguió toda la tarde con ese dolor de cabeza.

Terminaron las clases y cata seguia con esos ruidos, no se fue de inmediato a su casa, se despidieron de la profesora y se sento en las tribunas ya que no podía soportar los ruidos de su cabeza, Vicente Se le acercó viendo como ella se quedaba por lo que pasaba por su cabeza para le hablo.

-¿Éstas bien?

-No, me siento rara, siento como ruidos en mi cabeza aparte de lo que te tengo que decir.- dijo cata con las manos en la frente.

-Eso quería saber ¿qué quieres decirme?

-No se por donde empezar pero bueno, he sentido que estas últimas semanas te has alejado más de mi, si yo no te hablo tu no me hablas, con suerte me miras o ni eso, además siento que ya no puedo confiar en ti por tus actitudes, y además la he pasado muy mal estas semanas aparte de eso donde te perdi la confianza siento que no soy capaz de decirte todo lo que se me pasa por la cabeza cuando te vo con tus amigas, no digo que este mal que estés con ellas pero me has dejado bastante de lado y no puedo seguir con eso, no quiero que pase lo mismo que la primera vez porque me voy a sentir más mal todavía, y lo que no te podía decir es que aveces me dan ganas de volver a cortarme, se me ha pasado ese pensamiento tantas veces por la cabeza que lo un en lo que pienso es en eso, y esta vez pienso que lo mejor es terminar, porque se nota que tu has perdido el interés y yo no estoy bien para seguir con esto, y perdóname por todo esto, solo no quiero que sufras por mi culpa y por mis problemas.- dijo cata ya casi llorando y Vicente en medio de esas palabras se agacho enfrente de ella tomándole las manos y luego cuando termino de hablar la abrazo.

-Perdóname por haberte hecho sentirte así, te juro que no era mi intención y que no se va a repetir, de verdad lo siento y tu sabes que puedes hablar conmigo cuando quieras y por favor prométeme que nunca te vas a cortar aunque sea lo que más desees, no te hagas daño cuando sabes que cuentas conmigo y con la cami o la josefa, tu sabes que yo te amo y si me aleje fue para que tu también pasaras tiempo con tus amigas y no quería que te sintieras como que tuvieras que estar siempre conmigo.- luego de esto cata lo perdono y Vicente le limpio las lágrimas a cata le dio un beso, en ese momento todo se volvió negro para cata, no sabía sabía que estaba pasando, ahora se habían vuelto más intensos los ruidos de escuchaba, hasta que abrió los ojos y se dio cuenta que estaba en un hospital, miró a sus lados y estaba acostada en una camilla con un doctor a su lado.

Pasaron unas horas y el doctor volvió ya que la primera vez no había notado que cata estaba despierta. -Por fin despertaste Catalina, no te quiero abrumar ni nada pero para que sepas lo que te paso es que tuviste un accidente automovilístico y lamentablemente tus acompañantes fallecieron y tu quedaste en coma por dos meses hasta ahora.- dijo un doctor alto, de verdad y ojos color castaño mientras escribia quien sabe que.

-Pero ¿cómo me pudo pasar esto a mi? ¿Ésta seguro que mi familia está muerta?- pregunto cata angustiada ya que no podía creer lo que estaba pasando.

-No toda, solo una persona esta viva y viene a visitarte todos los días, un señor llamado Nicolas Quinteros.

Pasaron unos días y cata seguía en el hospital ya que le tenia que hacer varios estudios más, mientras ella esperaba poder salir de aquel lugar.

Fin.