CEASE.

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MAFER.

30/ Octubre/ 2025.

Estar rodeada de estás enormes paredes y de estás personas que lo único que tienen que hacer es juzgar, no es nada agradable.

Es insólito cómo todo había cambiado tan radicalmente y como es que; después de tantas cosas hermosas, ahora me encuentro en una corte esperando la llegada del chico de mi vida.

Esperando que mi más grande amor cruce esas puertas acompañado de su equipo de abogados.

En algún momento estuve apunto de darme por vencida, de huir y dejar todo inconcluso.
Sin embargo... no puedo aferrarme tanto a la idea del matrimonio feliz, porque no fue asi.

Por mi bien deseo cerrar este ciclo.

A mis espaldas pude sentir un ligero toque, dos dedos.
Volteó encontrándome con Martín, le sonrió con cierta tristeza y él, como puede me abraza.
Es un gran amigo, el mejor, creo que sin él me habría perdido por completo en todo este proceso.

Del otro lado de la corte puedo observar como Isaza me mira de forma desaprobatoria, puedo sentir como las lágrimas se acercan, sin embargo respiro profundamente y me aferró al abrazo de Martín.

Después de unos segundos el estremecedor rechineo de las puertas interrumpe el abrazo, me separó y volteó hacia la puerta.

Ahí está él.

Villamil que con pasos lentos se acerca.

Lleva un traje café que, desgraciadamente para mí, lo hace ver extremadamente sexy al igual que lindo.

Nuestras miradas se cruzan en el transcurso de su caminata.

Después ambos miramos a nuestros abogados.

Es tan difícil ser abogado y no poder llevar tu propio divorcio.

Todo esto pudo haber terminado tan distinto...

Aunque.

Ni siquiera tenía porque terminar.

NARRADOR.

Época actual.

Desde ese día en el bosque ambos jóvenes se habían vuelto inseparables, como sí fueran imanes con una fuerza de atracción dispuesta a derribar lo que fuera para estar juntos.

A pesar del agobiante trabajo que ambos llevaban, siempre encontraban tiempo para estar con el otro.

Los días pasaron como segundos.
Las semanas como minutos.
En un abrir y cerrar de ojos la gira estaba por terminar y ellos, ellos se encontraban escondidos en el cuarto de intendencia de un hotel.

— Quisiera no tener que ocultar nos más —suspiro el joven— eres mi novia —tomo el rostro de ella entre sus manos, acaricio suavemente sus mejillas y le dió un fugaz beso— y no sabes cuánto deseo gritarlo al mundo —volvio a besarla pero está vez fue un beso mucho más prolongado.

𝘾𝙐𝘼𝙉𝘿𝙊 𝙀𝙇 𝘼𝙈𝙊𝙍 𝙎𝙀 𝙀𝙎𝘾𝘼𝙋𝘼.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora