Mi futuro eres tú

Capitulo # 5

Así pasaron los años, Dafne siempre recibía un regalo de Severus cada año, primero fue la lechuza, luego una fina capa traída de uno de sus viajes, un gatito siamés, que llamó Salem.

El gatito dormía en el día en la habitación de su padre, pero en las noches acompañaba a Daphne a dormir.

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Una tarde calurosa, 5 parejas de jovencitos de 16 años y con las hormonas algo alborotadas se juntaron para sentarse a la sombra de un viejo árbol.

Severus se mantenía cerca, pero cuidando que nadie se diera cuenta.  Paso a una distancia prudencial del grupo.

Dafne suspiró emocionada_ya puedo morir tranquila _ replicó.

Los demás la miraron confundidos, pero Eileen siguió la línea de sus ojos notando que su tío era la razón de los suspiros de su amiga.

Estos años viviendo con su tío que aparentaba rudeza y amargura ante los demás, más sin embargo, en la calidez de su hogar era tierno y preocupado.

Se merecía una mujer que lo amará, y si su amiga Dafne era la indicada, ella también ayudaría a juntarlos.

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_Pronto cumpliremos 17 años suspiraba Dafne recostada en la cama tamaño king de la habitación de Romina_ podré casarme con mi gran amor...¿Cómo se sentirá compartir el lecho con él?

_Con mi padrino no tengo idea_ respondió sin pensar Romina, pero con Theo es muy excitante. Mi novio es cariñoso y atento.

Dafne la fulminó con la mirada_ ¿Por qué no lo publicas en el profeta mejor?_ cuestionó molesta.

_¡Lo siento, lo siento!_ no lo pensé _ además nuestras amigas si saben que te gusta mi padrino e incluso Eileen me aseguro que ella te ayudaría a atrapar a su tío. Y ya pensaste que quieres de regalo de cumpleaños.

_¡Sí…quiero que mi primera vez sea con Severus!_ replicó solemne.

_Mi padrino está pisando los 40 años... ¿Estás segura?

_¡Sí…completamente!_

Llegó el ansiado día,  sus amigos le habían preparado una fiesta sorpresa en el Salón de los Menesteres.

_¿Es necesario que utilice está venda?_ preguntó aburrida Dafne... Sí_ gritaron sus amigos.

La fiesta empezó temprano. Tragos iban y venían.  Situación que fué aprovechada por algunos para desaparecer con sus novias.

Daphne no estaba borracha, pero si lo suficiente para visitar a su amor prohibido.

Tambaleándose se acercó a la puerta de su oficina y golpeó despacio.

Severus estaba despierto leyendo un nuevo libro. Escuchó el leve golpe de su puerta más pensó que era el viento, así que continuo con su lectura.

Envalentonada golpeó una vez más un poco más fuerte. El profesor se levantó para ver quién era a esa hora de la noche.

…Dafne… susurró extasiado recorriendo sus virginales curvas con sus oscuros ojos_ deberías ir a tu habitación a dormir no te ves muy bien.

_¡No quiero dormir sola está noche!_ susurró para lanzarse a sus brazos pegando su boca a la suya.

Severus sintió su cuerpo temblar al contacto con su piel. Dudo, pero al final cedió al beso.

La besó despacio delineando sus carnosos labios con la lengua, la muchacha abrió los labios dándole apertura que no fue desaprovechada. Severus metió la lengua en su cavidad iniciando una batalla de lenguas, mordiscos y jadeos.