Descubrimientos.

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- Creeme que Jane no es absolutamente nada para mi - dijo James molesto

-A estas alturas no me interesa, acuestate con ella las veces que se te de la gana, eres libre y puedes hacerlo con quien quieras.

-Megan, hemos pasado muchas cosas juntos y no puedes tirarlo todo al tacho

Oh Dios, no debió decir eso. Le di una cachetada tan fuerte que hasta me dolio la palma de la mano.

-¿Yo fui quien boto todo al tacho? Te tiraste Jane y ahora me echas la culpa

James se acerco a mi lentamente, se arrodillo y me dio un beso en la frente

-Bebe, te amo. No sabes cuanto, dame una oportunidad

-James, me gusta otro - dije sintiendo un punzón en el pecho.

Este cambio su cara de disculpas a uno de ira incontrolablemente

- El hijo de puta de Liam

-No tarado, y no llames así a mi amigo o te rompo las pelotas - grite molesta

Hubo un silencio largo entre nosotros. No me gustaba que ambos estuviésemos en el salón de arte solos.

- Kyan ¿Verdad?

-No te interesa - dije molesta agachando la cabeza

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Kyan había ido a bañarse como siempre y salio mojado.

Este comenzó a besarme los muslos lentamentenamora pasaba su lengua por mis piernas.

Dios mio, se sentía tan excitante.
Puso sus manos en mis bragas tratando de bajarlas pero lo detuve cuando ya estaba por la mitad y me las coloque correctamente.

- Kyan - dije casi gimiendo

- ¿Bebe?

-Necesitamos hablar, de James.

Estaba echada en su cama y puso su cabeza en mi abdomen desnudó.

Comencé a jugar con sus cabellos mientras este cerraba los ojos.

-James sabe de nosotros - dije decepcionada

-Ya era hora de que se enterara - dijo subiéndose encima mio - tu eres mi chica

Que bien se sentía escuchar eso, era su chica. La chica de Kyan Harrison. El tipo que amaba mas que a nadie en este mundo.

-Y tu eres mi chico - dije dándole un beso en sus labios - solo mio

Todo esto parecía un sueño. Nunca había creído estar con un chico tan perfecto como lo es Kyan. Con solo verlo se me eriza la piel y ya quiero tenerlo entre mis brazos.
Pero también su personalidad única es lo que me fascina.

Ahora el problema era Julie. Ella estaba completamente enamorada de Kyan. Y eso me dolía. A pesar de lo mucho que lo amo, ella es como mi hermana. La quiero demasiado y no deseo que sufra.
Lo se, una situación demasiado complicada.

- ¿En que piensas mi amor?

- En todo lo que hemos pasado. Me siento una real tonta

- ¿Por?

-Perdí mi tiempo al no estar contigo. Me aguantaba las ganas de besarte

- Pues ahora me tienes cuando quieras y donde sea - suspiro - voy a descansar un poco ¿Si?

Este se echo boca arriba en la cama y puso musica fuerte en su celular.

Fui lentamente donde estaba el y me senté encima, en su pelvis.
Comencé a balancearme y este me miraba con lujuria.
Cogí mi polo y empecé a sacarmelo lentamente quedándome con mi brasier celeste.

- Te han dicho alguna vez que te ves excelente en esas prendas?

-Eres el único que me ha visto así - dije pasando mi dedo por sus abdominales.
Procedí a sacarle el short y estábamos por iniciar pero la puerta sonó.

Oh no por favor

Veía caer unas lágrimas de sus ojos celestes, mordía sus labios y parpadeaba para así creer que lo que veía era solo una pesadilla.

- Julie - dije casi sin aliento

Ella no dijo nada, solo se fue.

Salí rápidamente de encima de Kyan, este cogió mis brazos tratando de retenerme.

-Soy una completa perra- dije poniéndome la ropa mientras se me escapaban las lágrimas - yo sabia que estaba enamorada de ti y no me importó.

-No es tu culpa mi amor. Uno no elige de quien se enamora, Tenlo por seguro.

Le di mi sonrisa mas sincera pero tenía asuntos que atender.

Problemas ¡Vengan a mi! - Libro 1(terminado) Libro 2 (empezando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora