Capítulo Único

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- ¿Viajaremos de nuevo? - pregunto Menma, mientras veía a su madre empacar por quinta vez en la semana.

Recién habían llegado a esa zona, estuvieron ahí dos días. ¿Por qué debían irse de nuevo?.

- Menma - su madre lo miró con seriedad - sabes que estar en un mismo lugar por mucho tiempo me estresa.

Que gran mentira.

Algo que le gustaba a Sasuke era tener estabilidad, una casa cómoda, beber un té mientras lee un libro y su hijo está con el.

- Ya no rezongues - siguió con su tarea de empacar - verás que te gustara, será un hotel muy agradable, son famosos por el ramen.

- Promete que estaremos ahí más de una semana - cruzó los brazos con resignación - estoy cansado de viajar siempre, es divertido estar contigo mamá, pero, me gustaría tener amigos, ir a la escuela...una vida normal.

Sasuke Suspiro, quería darle esa vida a su pequeño, lo hubiera hecho junto a "el" pero las circunstancias de la vida no lo permitieron.

- Menma, ya hablamos de esto - cerró la maleta - somos nómadas, debemos estar de un lado a otro.

No podia decirle la verdadera razón de sus viajes.

- Prometo que algún día tendremos una vida estable - abrazo su pequeño cuerpo de 5 años - podrás ir a la escuela y tener tener amigos.

- Espero que sea así mamá -  correspondió al abrazo - no quiero promesas falsas

- Nunca te haría una promesa falsa - lo miró a los ojos.

Eran igual a los de él, tenían ese mismo azul que daba paz.

- Lo sé, es solo una broma.

- Debemos irnos al aeropuerto - tomo la maleta.

Odiaba hacer eso, decir adios a un lugar que no exploró.

- Si mamá - el niño sostuvo su mano - ¿Dejaras el celular de nuevo?, lo acabas de comprar.

- No es importante llevarlo, comprare otro.

- Eres un derrochador mamá.

Ojala ser un "derrochador" fuera la razón por la que Sasuke debía dejar todos los celulares que compraba en el mismo lugar donde se quedaban.

Pero si los llevaba con el, ese dobe idiota los encontraria más rápido.

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- Lo siento, de nuevo perdimos rastro de ellos - explicaba un pelinegro de coleta alta.

- ¡carajo! - golpeó su escritorio con fuerza - es como si le informaran.

Estaba frustrado, tenía más de 4 años y medio que buscaba a Sasuke con desesperación.

El maldito teme sólo le dejó una nota.

"No me busques, arruinaras su vida, te necesitan"

- ¿Cómo esta Menma?.

Nunca olvidara a su pequeño bebé, habían escogido juntos su nombre...uno de sus recuerdos más hermosos.

- Por lo poco que supimos, esta bien, las encargadas del hotel dicen que es un niño dulce y educado - encendió su cigarro - es lo que dicen todos.

No eran las primeras personas que entrevistanban para obtener pistas.

Mamá y MenmaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora