Miles de años más- Angel Devil x Lectora

12

-"A cuántas personas amaste antes de conocerme?" Angel decidió preguntar mientras ambos estaban recostados en el suelo de la terraza del apartamento.

Ambos observando el cielo estrellado en plena noche.

-"A muchísimas personas... Miles de personas he amado y miles han muerto en mis brazos..." alzaste tus manos mirandolas

-"Si yo muriera, te enamorarias pronto de alguien más?"

-"Si te digo que no, sería una mentira, y si te soy sincera heriría tus sentimientos. Pero como todos... Tardaría un tiempo en recuperarme de tu pérdida..." respondiste volteando a verlo "Tú amaste a alguien?"

-"Amé a alguien?..." murmuró mirando la luna "Amé a alguien..."

Volvió a repetir, levantándose de golpe y sujetando su cabeza, ese gesto hizo que te asustes.

-"La persona que amé... y que me amaba..." continuó diciendo mirando sus manos temblando "La maté yo..."

-"Duele mucho... Y te toma tiempo recuperarte... Quizás aún no lo superas y fue cruel de mi parte preguntar-"

-"No" te interrumpió "No lo recordaba..."

Te quedaste en silencio mirándolo para extender tus brazos hacía él, haciéndole una seña de que se acerque a ti.

Con algo de miedo, se inclinó hacía ti, siendo atrapado por tus brazos y lo abrazaste con firmeza.

-"Ella lo hizo... verdad? Te hizo olvidar... También lo intentó conmigo..." murmuraste sin soltarlo

-"Si lo sabías... Si lo sabías por qué no me dijiste?..."

-"Porque tenías que salir de ese control por tu cuenta, de nada iba a servir que te diga algo en lo cuál no crees posible"

El muchacho se sintió traicionado, pero tus palabras tenían sentido, lentamente comenzó a corresponder tu abrazo, acurrucandose en tu pecho, podía escuchar los latidos de tu corazón de esa forma.

Los humanos...

Son fascinantes.

La calidez de sus cuerpos, sus sonidos, sus caricias.

Nunca experimenté nada de eso hasta ahora.

-"Realmente me dirás... Cuando este a punto de hacerte daño? Prometeme que me apartarás y que no me tocarás más, no puedo perder a otra persona la cual no me ha temido y no se ha alejado de mi lado..." murmuró aferrandose a ti

-"Lo prometo" besaste su frente y acariciaste su cabello "No me harás daño... Y si ese día llegara, lo sabría inmediatamente y te lo haría saber... Mi percepción de la vida es alucinante..."

-"Cómo lo ves?"

-"Mientras estamos abrazados... Puedo observar mi propia vida, que es una pequeña pieza, sujeta a una enorme soga... Una soga hecha por millones de hilos... Y veo hilo por hilo romperse poco a poco... Tan poco que ni siquiera reducen el tamaño de aquella gran soga..."

-"Puedes ver la mía?" Preguntó alzando la cabeza, así podía ver tus ojos directamente

Tomaste su rostro entre tus manos y lo observaste.

-"Es muy curiosa... Es una soga bastante firme... Normal... Pero tiene varios hilos sueltos, largos, que no se separan de tu soga de vida... Esas deben ser las vidas que has quitado... Esperando ser utilizadas para volverse armas... Aferradas a ti porque no tienen dónde más ir..."

-"Así que siguen ahí..." desvío la mirada por un momento

Notaste enseguida una pizca de tristeza en sus ojos, y sujetaste firme sus mejillas, haciendo que te vuelva a ver.

Tomaste una de sus manos para llevarla a tu rostro y la besaste.

-"Tus manos son pequeñas... frágiles... tus dedos son delgados... tus nudillos se ponen rojos con facilidad... son unas manos hermosas" mencionaste apegando tu mejilla a su palma y sonriendole "Son unas manos que para mi, nunca harán daño, que son solo para amar"

Continuaste dejando besos en su mano, en su palma, en su muñeca, en sus dedos y en sus nudillos.

-"Solo dan paz..." agregaste mirándolo "Y eso me basta... para amarlas"

Cuando finalizaste aquella frase depositaste un beso en sus labios, sin separarte de él por unos segundos.

En el momento en que te apartaste, pudiste ver sus mejillas rosadas y sus alas extendidas, te pareció sumamente tierno su reacción. 

-"Y debo agradecerte... Porque tú vas a ser mi salvador... El que me permitirá salir de esta maldición... Y vivir una vida normal finalmente..." murmuraste acariciando su labio inferior con la yema de tu dedo pulgar "Gracias..."

-"Deberás agradecerme... Dejando que te toque... Y tocándome lo más que puedas... Sujetando mi mano, abrazandome... acariciando mi mejilla, mi cabello, todo de mi... y... basándome" Respondió el Angel besando tu pulgar

-"Por supuesto" asentiste "Cada año que quites de mi pesada carga... Será una caricia y un beso más que te daré..." juraste en una sonrisa