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Akutagawa termina con los brazos alrededor de Chuuya, le cuenta sobre sí mismo sin tapujo y Chuuya solo lo escucha, su olor cambia dependiendo de cómo reaccione a la información, entonces Akutagawa exprime al máximo sus recuerdos felices.

Luego de un rato, Chuuya observa el reloj de la pared, debería volver a casa.

Probablemente, estén muy preocupados en ovejas, no debería quedarse más tiempo aquí.

—Akutagawa, tengo que irme— Le dice.

Siente el cuerpo del niño tensarse y le acaricia la cabeza.

—¿Por qué?— Pregunta sin pensar, luego se arrepiente un poco ¿Y si Chuuya se enoja?

—Tengo que ir a casa— Le responde, pero aun así le acaricia la espalda, así como lo hacía con Yuan cuando de niña veía bichos raros y se asustaba.

Akutagawa inconscientemente se frota en el cuello de Chuuya.

—¿Casa?—

—Sí, tengo que ir a asegurarme que todos estén bien —

Chuuya lo toma de los hombros y lo aparta con cuidado, Akutagawa lo observa fijamente.

—Entiendo— Murmuró.

—Puedo volver otro día ¿Si? No te pongas triste —

—No estoy triste — Responde.

—Entonces, ¿Por qué lloras?—

Akutagawa lleva una mano a su rostro y siente la humedad de las lágrimas.

¿Por qué llora? ¿Se siente abandonado? Es extraño.

—No lo sé —

Chuuya suspira y le limpia el rostro.

—Está bien, está bien, volveré mañana, entonces recupérate rápidamente ¿Si?—

Ve a Chuuya ponerse el parche y el olor poco a poco se va haciendo más tenue.

—Bueno— Murmura.

Chuuya se levanta y sale de la habitación luego de despedirse.

Mira a Gin y a Dazai.

—Adiós Gin— Le dice a la niña.

—Adiós— Respondió ella, luego se levantó y entró a la habitación a ver a su hermano.

Gin siente el olor todavía vigente en la habitación.

Ve a Akutagawa, está sentado en la cama mientras se envuelve en las sábanas.

—Hermano— Murmura ella y se sienta a su lado— ¿Estás bien?—

—Sí, él dijo que soy fuerte—

—Porque lo eres—

—Él es como yo, Gin, él dice que puedo ser tan fuerte como él— Esconde su rostro en las sabanas —Eso me hace feliz—

Gin sonríe, su hermano no suele ser feliz muy seguido, parece que Chuuya no es mala persona.

Espera que Chuuya regrese otro día a volver a hacer feliz a su hermano.

Gin lo abraza.

—Eso es genial—

—Me dejó abrazarlo y mis heridas dejaron de doler, es como cuando papá y mamá lo hacían—

El mas fuerte del SuribachiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora