The Thing With Feathers

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Lan Wangji no estaba contento de que shufu lo sacara de la habitación, aunque no sabía qué hacer con el niño que lloraba y al que había cuidado durante casi tres semanas. Estaba a punto de sentarse afuera y simplemente esperar a que le permitieran volver a entrar, pero Xichen se volvió hacia shufu.

"Tío, me gustaría llevar a Wangji al mercado para comprar un tambor sonajero para el joven maestro Wei".

Inmediatamente entendió: el gesto podría ayudar a la memoria de Wei Ying. Si realmente no recordaba nada, como parecía ser el caso, darle el juguete nuevamente podría recordárselo.

Si nada más, podría hacer sonreír a Wei Ying.

Shufu frunció el ceño.

“Por favor”, agregó Wangji, esperando que la cortesía lo convenciera.

Qiren miró hacia atrás a la habitación, donde los Jiang estaban tratando de consolar a Wei Ying, y luego sacó su bolso para darle algunas monedas de plata a Xichen.

“Puede consolar al chico. Compra solo eso y devuélvelo inmediatamente.”

Wangji se aseguró de hacer una reverencia a su tío para mostrar su gratitud, luego dejó que Xichen guiara el camino.

“Gracias, xiongzhang”, dijo en voz baja mientras serpenteaban por Lotus Cove.

Xichén sonrió. “Por supuesto, Wangji. En aquel entonces, cuando mencionaste regalar tu juguete, me sorprendió. Será un amigo digno. Incluso le dijiste tu nombre.”

Wangji frunció el ceño. Mientras Wei Ying había estado llamando su nombre, sin duda, no se lo había dicho. Aunque lo había reconocido, eso había sido una sorpresa.

"No lo hice", dijo finalmente, adhiriéndose al principio de Lan con respecto a las mentiras. Las mentiras por omisión seguían siendo mentiras.

La sonrisa de Xichen se desvaneció un poco ante eso. Parecía pensativo, preocupado.

“Y es posible que no recuerde cómo lo sabe”.

Wangji asintió. Preguntar no serviría de nada.

“Shufu se preocuparía”, dijo Xichen mientras salían del recinto. "Pero si esto funciona, tal vez el joven maestro Wei recordará cómo lo sabe".

Wangji no pudo pensar en una respuesta, así que solo asintió de nuevo. Afortunadamente, su hermano estaba familiarizado con su silencio y nunca le importó que no hablara mucho.

Lotus Pier era un lugar animado, mucho más ruidoso de lo que Wangji estaba acostumbrado, ya que se había alojado en gran parte en Cloud Recesses. Pero incluso Caiyi no era tan ruidoso, la gente de Yunmeng era mucho más bulliciosa que la de Gusu.

En poco tiempo, encontraron un puesto con coloridos juguetes para niños, que incluían mariposas de hierba, cometas, animales de peluche y exageraciones de monstruos y criaturas mitológicas, y una variedad de instrumentos musicales sencillos.

Había una variedad de tambores de cascabel pintados de colores brillantes en exhibición, y Wangji se sintió atraído por uno con madera teñida de un rojo intenso, tallado con lotos alrededor del tambor, con conejos pintados en las cabezas: uno blanco en un lado, otro negro. en el otro. Las cuentas estaban adheridas al tambor con cintas negras delgadas, y las cuentas mismas estaban hechas de madera tallada, de nuevo, para parecerse a flores de loto y pintadas de púrpura.

Apreciaba los colores auspiciosos: el rojo para alejar el mal y atraer la felicidad, el negro para la estabilidad y la protección, y el púrpura para la conciencia espiritual y la curación. Agregaron al mensaje que quería enviar a través del regalo, dijo lo que no pudo.