Subió a la cama y se acurrucó en una bola dentro de una posición fetal, dejando que grandes lagrimas bajaran por su rostro. Maverick era igual aJeremy, no, era peor. Era tres veces másgrande que su ex y diez veces másfuerte. Por primera vez Cecil comenzóa lamentar su decisión.
Quería ir a casa. Era un hombre mantenido y no podía aceptar eso. Cecil tenía que salir de ahí. No habíamanera en que se quedara en esa jaula de oro. Se limpió las lágrimas y se puso de pie.
Cecil cerró la puerta de la recamara, asegurándola. Abrió la ventana y vio hacia abajo. Salió por la ventana cayendo en la tierra sobre sus pies. Vio alrededor para ver si lo habían visto, cruzó el patio y se dirigióal bosque.
Huyendode la casa, Cecil se dirigió hacia el único lugar en el que pudo pensar en ese momento. Le tomó lo que le pareció horas llegar al único lugar que creyó seguro.
-Chad, soy Cecil. Abre - Hombre odiaba haberse dirigido a su gangoso compañero de trabajo. Pero ¿A dónde más podría ir? Su departamento sería el primer lugar dondelo buscarían. Chad finalmente abrióla puerta, haciéndosea un lado y permitiéndole entrar.
- ¿Quésucede, Cecil? ¿Finalmente decidiste honrarnos con tu presencia? - Cecil girólos ojos. El tipo era una molestia.
- Hey,solo pensé que podía venir y aceptar tu ofrecimiento de jugar - Cecil pegó una falsa sonrisa en su cara. Eso realmente apestaba, se dio cuenta de que no teníaa nadie cuando necesitaba de un lugar a donde huir. Solo podía soportar esto y actuar con esos chicos como si fueran amigos.
-Seguro, entra y juguemos. Sasha acaba de terminar la últimaversión. Es un asesino - Chad se rio de su propia broma. Quizás se había precipitado al salir de su prisión. Quizás tratar con las dominantes maneras de Maverick no era tan malo comparado con las malas bromas de Chad y su nasal voz. Suspiró. Demasiado tarde ahora. Para ser honesto, temía enfrentar a Maverick. Había ido demasiado lejos.
Cecil se sentó aburrido no podía sacar de su mente a su por siempre importante amante. Jugó el juego con un falso entusiasmo, declinó el ofrecimiento de alcohol comprado ilegalmente y empezóa extrañar horriblemente a Maverick. Quería regresar.
Cecil sabía que huir era una manera infantil de tratar con los problemas. Él había entrado en pánico al recordar las acciones de Jeremy y sintió laurgencia de huir. Ahora él estaba en un tipo diferente de infierno. En el séptimo circulo, para ser exacto, con Chad y el video juego.
Levantó la cabeza cuando oyó aullidos. ¿Lo habríanencontrado? Había estado fuera por horas. Cecil estaba cansado y hambriento. Chetos y refresco no contaban.
Se oyó un fuerte golpe en la puerta del frente. Cecil saltó. Sentía la urgencia de esconderse en el armario. En lugar de eso, vio como Chad se asomaba a ver por la mirilla de la puerta y se ponía pálido. Si, su pareja estaba aquí. Tiempo de regresar a la granja feliz.
Los golpes se hicieron más fuertes y un audible gruñido lo acompañó. Chad corrió a la recamara y cerró la puerta. Cecil girólos ojos y se preparó para el abuso. Abrió la puerta y vio la molesta expresiónde su pareja.
Maverick tomó a Cecil y lo jaló a sus brazos. Eso no era exactamente lo que esperaba, pero podía aceptarlo. Había apostado que abría golpes alrededor.
-Vamos a casa - Dijo Maverick en un serio tono de voz.
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La pareja de Maverick
LobisomemMaverick Brac ha formado su propia manada, llamada "Manada Brac". Con catorce miembros bajo su mando, todos ellos tienen una cosa en común, su preferencia por los hombres. Cecil Walter está viviendo una vida que no le desearía ni a su peor enemigo...