29. La cita (parte II)

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Doble actualización
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Me gusta, pero como que no

Quite las trenzas que me había hecho y opte por dejarlo suelto con unos ganchitos de mariposas

Literalmente son las 4:40 y Alejandro vendrá a las 5:00. Y no estoy lista!!!

-Okey Iris... Todavia hay tiempo-susurre para mi misma

Fui a mi armario y busqué la bolsa donde se encontraba el traje de baño

Suspiré

Era hora de ponermelo

Me quite el vestido negro que me había puesto al llegar del colegio y me puse el traje de baño de 3/4 piezas

Corri a mi espejo de cuerpo completo y me admiré...

Suspiré al ver que no me veía como las demás chicas

Igual te ves muy linda

Tomé mi celular y me tome una foto en el espejo y se la mande a mis amigas

No espere que me respondieran y baje corriendo con las sandalias en la mano

Tenia mucha hambre

Tome lo primero que encontré, lo cual fue un pedazo de pan que me comí con queso y jamón

Solo le di un par de mordiscos al pan cuando me vi interrumpida por el timbre de la casa que había sonado

Abri los ojos como platos y me sente en uno de lo bancos que habia al lado de encimera

Me puse las sandalias tan rápido como oide y corrí, literalmente a abrirle a Alejandro

Me mire en el espejo que habia cerca y respire hondo

Todo estará bien

Abrí la puerta con cuidado para ver a un Alejandro con ropa bastante playera

Llevaba unos shorts tipo bermudas con un estampado tropical que hacia juego con una camisa de botones abierta con una playera blanca

Lo acompañaban unos lentes de sol negros y llevaba una canasta con el

Le sonreí por inercia, como automático

Pestañee varías veces para salir de mi trance

Note que el también se habia quedado escaneandome

Yo no era la gran cosa, llevaba el conjunto que compre, unas preciosas sandalias blancas atadas hasta casi la rodilla, un bucket jat negro y unos lentes de sol con vidrio naranja, combinando con el conjunto

-Te ves hermosa, Iris-dijo rompiendo el silencio

Sus tenían un brillo que nunca habia visto antes, me gustaba, y mucho

-Creo que en este momento, tu más -le respondí -tus ojos tienen un brillo inigualable

-Eso solo lo causas tu-musito y acto seguido me sonroje

Cubrí mi rostro con ambas manos para tapar mi inevitable sonrojo

Sentí sus manos tomar las mías y luego las quito de si

-No lo hagas, te ves preciosa asi

Por obvio razón me sonroje aún más

Sus manos no se retiraron de las mias y eso hizo que me quedara embelesada admirando sus brillosos ojos

Ahora ya no duele [EN PAUSA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora