Ahora ya no duele [EN PAUSA]

20. Es mejor que no sepan

—Chao chicas! Nos vemos mañana!

—Adios Bárbara! Cuídate mucho, avísanos cualquier cosa

—No se preocupen, nos vemos mañana

Habíamos dormido en casa de Bárbara, queríamos estar para ella en todo momento

Vi el reloj en mi celular

Eran las 10 de la mañana

A pesar de todo nos levantamos temprano, tomando en cuanta que nos dormimos bastante tarde

—Van directo a sus casas?—preguntó Leonora

—Yo no, por qué?—dijo Marcela

—Para ir a desayunar, no hemos comido nada.

—Tienes razón. Iris? Tu puedes?

Quite mi mirada de aquellas dos

Podía comer?

No había estado triste ni nada, pero Aarón había estado acechando mi cabeza

Solo pensar en comer me revolvía el estómago

Pero... No podía decir eso? O si?

No podía, ellas no han comido; Y no pueden estar sin comer

Las volví a mirar, esperaban mi respuesta

—Si, si puedo. Vamos—Hable forzosamente

Ellas dudaron un poco, pero empezaron a caminar

El corto camino fue silencioso. Nos detuvimos en el parque, específicamente en mi cafetería favorita

Dónde los mejores cafés helados eran hechos

Entramos y el olor a café recién hecho me lleno las fosas nasales

Una delicia

Buscamos una mesa, siempre me gustaron al lado de las ventanas. Podía ver todo el paisaje

—Iris... —Fui capaz de escuchar el susurro casi inaudito de Leonora —Si vas a comer?

Ella me conocía tan bien...

—Si, tal vez solo un poco. No te preocupes

Me sonrió y llamo a la mesera

—Buenos días que van a querer?

No escuché los pedidos de mis amigas. Estába en otro mundo

Solo sentí un toque en mi hombro que me hizo salir de mi burbuja

—Iris?

Sacudí mi cabeza y me dije a la mesera

—Lo mismo de siempre Daniela

Lo cual equivalía a un café helado con caramelo y unas galletas de chispas

Leonora se iba a enojar

La mesera se fue y Leo no perdió el tiempo.

—Qué es lo de siempre Iris?—dijo Leonora con voz autoritaria

Me encogí en mi asiento y le sonreí

—No querrás saberlo

—Dime

Suspiré dramáticamente

—Café helado con caramelo y... Galletas con chispas

Un silencio se volvió en la mesa

—Leonora....—No lo dije yo. Lo dijo Marcela
Ella sabia lo que se venía