🃏𔘓 ¦ Epílogo

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–Adiós Hoseok hyung, adiós Bin–, se despidió Jimin de su amigo y del chico que hace poco había entrado a trabajar luego de que se Jihyo fuese despedida

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–Adiós Hoseok hyung, adiós Bin–, se despidió Jimin de su amigo y del chico que hace poco había entrado a trabajar luego de que se Jihyo fuese despedida. Bin era un tierno chico con cara de gatito y cabello negro y largo que era un poco menor que él. Ambos se despidieron agitando sus manos, Bin alarmándose porque casi se le caía la bandeja de su otra mano por andar algo distraído y aún no estar acostumbrado.
 
Se abrigó aún más si era posible, había nevado en Seúl en la noche y él últimamente estaba algo enfermo y le picaba la garganta, por lo que se envolvió en la bufanda y sonrió cuando le llegó el mensaje de Jungkook que ya estaba esperándole afuera.
 
Un mes había pasado luego de esa tarde, podía jurar que el mes más feliz de su vida, no había día en donde no viese a Jungkook al menos por 5 minutos y el castaño siempre le recordaba de alguna u otra forma lo mucho que le amaba, lo feliz que le hacía y como hacía desaparecer todas las inseguridades que Jimin sentía. Jungkook era simplemente tan perfecto con él, que Jimin no podía sentirse más afortunado de tenerlo y poder tomar su manos sin miedo de nada, confiaba en él con los ojos cerrados y sabía que Jungkook también en él.
 
Se abrazó con fuerza al fornido cuerpo de su novio -que bien sonaba poder decir eso, tanto en su mente como públicamente, amaba decir que Jungkook era su novio todo el tiempo-, sintiendo como los brazos de este envolvían su cuerpo con fuerza y enterraba su nariz entre sus cabellos rubios. Jimin suspiró gustoso, cerrando sus ojos y colocándose algo de puntitas para llegar más arriba y abrazarle mejor.
 
–Hola, mi Minnie–, susurró Jungkook, separándose luego de un rato y tocándole la nariz con la punta de uno de sus dedos, para luego dejarle un suave y cariñoso beso corto en los labios helados en forma de saludo, Jimin le sonrió contento. Hoy tendrían una pequeña cita antes de que Jungkook entrase a exámenes nuevamente y no puedan verse demasiado, pero antes de siquiera tomar su casco de motocicleta, Jungkook volvió a hablar, –Antes de todo, quiero hacer algo.
 
Jimin le miró ladeando la cabeza, asintiendo, –Claro que si, ¿qué cosa?–, preguntó curioso, y frunció el ceño al ver a Jungkook apretando los labios y mirando al cielo nublado.
 
–Jihyo quiere hablar contigo en persona–, eso descolocó a Jimin, confundiéndolo aún más y mirando a Jungkook pidiéndole alguna explicación, –No sé qué quiere decirte, me ha insistido toda la semana con que quiere hablar contigo. En todo caso le dije que si tú no querías, no iban a hablar, pero si quieres, nos está esperando en el campus–, Jungkook se encogió de hombros con una mueca.
 
Jimin se llevó un dedo a la boca, mirando a un costado y pensando por un par de segundos lo que le acababa de decir Jungkook. Jihyo quería hablar con él, no sabe para qué, y tampoco sabe por qué recurrió a Jungkook para buscarle cuando podía hacerlo ella misma. Su curiosidad solo aumentó aún más, así que luego de aproximadamente un minuto, le asintió a Jungkook y se encogió de hombros.

–Está bien, vamos.
 
Jimin aspiró algo nevioso al bajar de la motocicleta en el estacionamiento de la universidad de Jungkook y Jihyo, sintiéndose como un niño pequeño cuando Jungkook le quitó el casco y besó sus labios castamente, sonrojándose un poco al ver a los alumnos que pasaban por allí mirarle con curiosidad. Sintió su mano ser tomada por la de su novio y le sonrió intentando mantener un poco la calma, antes de que este comenzara a jalarle suavemente por el estacionamiento hasta salir de este. La universidad era estatal, por lo que Jimin podía entrar allí sin problemas si estaba acompañado de Jungkook.
 
Entrando a lo que Jimin reconoció como el patio central que daba a la salida pública, se sintió observado por todos los que estaban allí, sabía que su novio era bastante popular allí, y que llegara tomando de la mano con un niño que no estudiaba allí obviamente que era extraño, pero Jungkook parecía ignorarlo y solo lo llevaba hasta la pequeña rubia sentada en una de las tantas bancas solitarias que Jimin pudo reconocer.
 
Tragó saliva al notar la mirada de Jihyo sobre ellos, especialmente sobre sus manos tomadas, pero Jimin sabía que ya no podía darse vuelta y correr lejos, por lo que aspiró aire intentando calmarse cuando finalmente ambos se detuvieron frente a la rubia, quien se levantó temblando por el frío que hacía.
 
Ninguno de los tres dijo nada, Jungkook tenía una mueca de molestia en el rostro y no soltaba la mano cálida de Jungkook, y el rubio solamente no sabía que hacer y estaba esperando lo que sea que dijese la rubia.
 
–Jimin–, soltó Jihyo, con esa voz que el rubio ya se había desacostumbrado a escuchar, sintió su cuerpo temblar un poco por debajo de su chaqueta. Solo pudo asentir hacia la rubia, esperando a que continuara y sintiendo un apretón de la mano de Jungkook.
 
Jihyo se miraba algo triste, y pudo notarlo cuando volvió a hablar, –Yo... lo siento–, Jimin sintió su corazón de abuelita quebrarse al verla con los ojos nublados, pero se quedó estático como piedra al notar que Jihyo quería seguir, –De verdad lo siento, ¿si?, por todo... No estaba pensando claro, solo pensaba en tener a Jungkook conmigo y ver como le gustabas más tú me hizo hacer cosas de las que ahora me arrepiento–, Jihyo sorbió su nariz para evitar llorar, mirando a Jimin mientras se mordía el labio por un par de segundos antes de seguir, –Te incomodé tantas veces, te vigilé tanto y hasta te hice daño... y de verdad me arrepiento tanto porque sé que ya no confías en mi y perdí la pequeña amistad que tenía contigo... me dejé llevar por mi enamoramiento y te dañé, dañé a Jungkook y a mi misma de paso.

Jihyo miró hacia el suelo luego de decir aquello, y Jimin escuchó un suave sollozo, por lo que soltando la mano de Jungkook bajo su extrañada mirada, envolvió a la rubia en un abrazo que la tomó por sorpresa, Jimin la sintió tensarse por encima de las capas de ropa por un par de segundos, antes de ponerse a llorar abrazada a él suavemente.
 
–Está bien, Jihyo noona–, calmó contra su oído, acariciando la espalda de la chica, –No estoy enojado contigo y te perdono, no hay rencor–, tranquilizó. Y sintió como la chica se separaba de él y se limpiaba furiosamente las lágrimas bajo ambas miradas.
 
–De verdad eres un ángel, Jimin–, dijo, soltando una sonrisa triste, –Ya sé por qué Jungkook está tan enamorado de ti–, ante eso, Jimin se sonrojó, y ambos rubios miraron a Jungkook, quien se desvió a un costado formando una linea con los labios que hizo a Jimin reir un poco antes de volver a escuchar a la rubia, –No volveré a entrometerme en tu relación con Jungkook, los dejaré ser felices en paz... Gracias, Jimin, de verdad necesitaba decirte todo esto–, agradeció, tomando el bolso que reposaba en la banca donde antes estaba sentada.
 
–No hay de qué, Jihyo, espero que estés bien–, deseó con una sonrisa, tranquilo y sereno cuando vio a la rubia asentir aún con las mejillas húmedas, y agitó su mano hacia ella cuando la vió darse vuelta para marcharse hacia la salida con la cabeza hacia el suelo.
 
Jimin no dejó de mirar la cabellera rubia de Jihyo hasta que la perdió de vista cuando se perdió al doblar en la salida del campus universitario, y suspiró sin borrar su sonrisa, jamás esperó que la rubia le pidiese perdón, pero ahora estaba más tranquilo y sentía hasta su sangre más liviana.
 
Ahogó un grito al sentir como Jungkook le jalaba hacia él y le apretaba contra su pecho. Ambas frentes se juntaron y Jimin sintió su estómago calentarse al ver la bonita sonrisa cruzar el rostro de su novio.
 
–Tú de verdad eres un ángel, Park Jimin–; susurró, soltando una risita al escuchar el balbuceo del menor ante la vergüenza por estar en un lugar tan recurrido, –Y Jihyo tenía razón, esa es una de las miles de razones por las cuales me enamoré de ti.
 
Bueno, ahora la universidad de Jungkook le conocía como el pequeño novio tímido y sonrojado de Jeon Jungkook, quién le había comido la boca frente a todos y dejándolo como un pequeño manojo de nervios.
 
Sí, amaba a su novio.

Holiiis, este es el epílogo de for me?, espero os guste y en nada os subo el extra, gracias por todo

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Holiiis, este es el epílogo de for me?, espero os guste y en nada os subo el extra, gracias por todo. Se despide:

–almin♡

For Me? ♡ Kookmin Donde viven las historias. Descúbrelo ahora