«Me Gusta»

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~Narra Jungkook~

El alzo la mirada y me vio fijamente a los ojos por un par de minutos, se paro del columpio y fue directo a la casa yo le seguí los pasos.

- ¿A dónde vas?

- Me siento muy cansado, quiero dormir.

- ¿Todo esta bien?

- Solo quiero dormir Jungkook.

- Okey, ve. - me quede un rato mirando como subía y se metía a su cuarto, después me fui a sentar en el sofá y a los minutos me quede profundamente dormido.

Sentí que alguien puso algo encima de mi pero no le preste atención ya que estaba muy cansando.

A la mañana siguiente me desperté como pude y fui a buscar a Jimin a su cuarto, toque tres veces pero no contestaba, es cuando fue que me asuste y abrí a la fuerza la puerta y lo vi durmiendo como un ángel, me acerque un poco mas a su cama y me senté a la orilla de la cama solo para observarlo, su piel era muy suave, su cuerpo era totalmente normal, con curvas, era hermosa su cara, su sonrisa y sus ojos eran la combinación perfecta, me acerque mas y le empecé a acariciar el rostro y su cabello, el sonreía dormido.

¡NO JUNGKOOK DEBES CONTROLARTE! Me aleje y salí por un poco de jugo. ¿Qué estaba pensando? ¿me gusta?

- Jungkook.

-Taehyung ¿Qué ocurre?

- Solo vine a ver a mi hermano, tengo que regresar a la oficina ¿Dónde esta?

- Dormido y creo que no despertara todavía.

- Bueno, tengo que pasar por la farmacia a comprar sus medicinas, ya mañana tiene que volver a sus clases, no quiero que se las pierda.

- Calma Taehyung no se las perderá, ve tranquilo que cualquier cosa te marco.

- Gracias Jungkook, te debo una.

- No nada de eso, lo hago por que yo quiero.

- ¿Y por que te gusta mi hermano cierto?

- ¿Qué?

- No finjas Jungkook, se que te gusta.

- No Taehyung no, yo solo lo veo como un amigo.

- Ujumm, no he quedado muy convencido pero respeto tu decisión, ahora me voy.

- Dale - prepare el desayuno mío y de Jimin, espere que se despertara y sentí que poco a poco bajaba las escaleras, hasta que entro a la cocina y tenia una camisa demasiado transparente que se le reflejaba muy bien su cuerpo y un short de pijama, se veía muy provocativo, me le quede mirando un rato.

- ¿Qué me ves tanto?

- Nada emm, nada.

- ¡ERES UN ASQUEROSO JUNGKOOK!

- ¿pero que?

- No nada ¿Por qué sigues en mi casa?

- Dije que seria tu niñero.

- ¿hasta cuando?

- Hasta cuando me de la gana.

- ¡Eres un tonto!

- Gracias por el cariño.

- JÁ quisieras - agarro su tostada y se fue a la sala, yo lo seguí y se sentó en el sofá a ver TV, yo me senté a su lado cosa que le molesto pero no me importaba, me gustaba molestarlo.

- ¿Qué quieres de mi?

- Que estés bien.

- Estoy bien.

La Historia De Mi Omega-Kookmin «Omegaverse»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora