Llevo varios días sin escuchar su voz, sin verlo a través de los espejos, sin sentir su presencia en cada sueño o sentir su olor en cada tragedia. Es extraño, aún no me acostumbro a este silencio. A esta falta de ruido que hay arriba.
En ocasiones me obligó a pensar en él, quiero que este aquí. Me siento sólo sin él que lo busco en cada momento que puedo. Imitó cada uno de sus movimientos, sus expresiones y ataques. Trato de que algo de eso me recuerde que él sigue aquí, que puedo conseguir que regrese. Pero no, fue mi decisión que se fuera.
Me aterra estar solo, nunca podre acostumbrarme a estarlo, pero debería de hacerlo. Siempre lo estoy (o estaba, siempre estaba con él), no importa si hay gente a mi alrededor, me siento sólo. Pero es parte de la vida. Es parte de todo esto, así que debo afrontarlo. Como dije, decidí dejar de verlo, dejar de escucharlo, pero no quiero soltarlo, es lo único que le daba sentido a mi existir, ahora debo de seguir. ¿Podré hacerlo?Recuerdo que me dejo una nota en la mesa de noche. Fueron 7 palabras que me hizo feliz y a la vez me dio miedo.
En los peores momentos voy a regresar.
Lo que quiere decir que volverá, pero cuando lo haga tendrá más poder que nunca y yo seré tan débil que no dudare en tomar la navaja y cortar la voz de raíz.
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Antología de verano
RandomA veces hay historias que surgen de la nada. Historias que son tan espontáneas que no sé cómo colocarlas en novelas. En la siguiente antología leerán mis historias que no van a pertenecer en novelas pero son tan buenas para ser parte de está compila...