| 一拳 | [LMK x Oc!Male]

: 𝗢𝗻𝗰𝗲 :

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[Capítulo 11: ¿De regreso? Salvando Megapolis]

Hiromi salió empapado de la cascada, no sabiendo como abrirlo tuvo que atravesarlo lo más rápido que pudo. Irritándolo al sentir sus ropas mojadas y ya pesadas por el agua que absorbieron, tenía que darse prisa en terminar todo ese embrollo para regresar a su hogar y lavarlas.

Mientras caminaba con cierta prisa al recordar la ida de MK, pensó en su pequeña 'conversación' con Monkey King. Por supuesto el mono dorado quería sacarle respuestas sobre eso, hubiera sido extraño que no preguntara o anduviera cauteloso cuando estaban enfrente, pero supuso que el Demonio Mono no quería hacer un interrogatorio con MK en medio para no sospechar

Aún estaba asombrado que Monkey King estuviera buscando un sucesor, y no uno cualquiera, sino en elegir a MK como su sucesor.

Sospechosas flotaron en su mente, ¿por qué el Mono Celestial buscaba un sucesor de todas las cosas? ¿Para prepararlo para una calamidad o algo así? ¿Por una profecía?... ¿O por qué quería?

Teorías sobrevolaron, pero con ninguna al dar una respuesta clara a la mente (probablemente) rara de ese mono dorado. Sin embargo, si MK fuera o no su sucesor, no le importaba ni mucho menos cuál es su propósito; él iba estar alado de su amigo a donde fuera, tal vez alado del mayor le dé oponentes retadores.

Porque si de algo recuerda de la leyenda de Sun Wukong, el mono desde que nació fue muy imprudente, egoísta hasta desastroso por sus incontables 'hazañas' (estupideces) al enfurecer a muchos Demonios como Celestiales. Así que tenía la ligera ilusión, si Monkey King seguía vivo en esas épocas modernas, entonces también sus enemigos que probablemente seguían odiando al Demonio Mono.

Por muy egoísta que fuera, ansiaba que alguno apareciera con intención de retar a MK o vengarse para que él pueda encargarse.

Tal vez con la presencia de ese Demonio Toro, sea la entrada a un nuevo mundo de oponentes que puedan darle un reto. Y, quien sabe, si Monkey King desconfiaba tanto de él como 'amenazarlo', darse un combate y saber cuan fuerte es por sus muchas historias.

Y antes de que piensen que es un adicto a las peleas, no lo era. Antes de todo, él quiere vivir cómodamente junto sus padres ausentes; solo hace de 'Héroe' para divertirse, un pasatiempo al cual sacar su potencial y encontrar cosas nuevas nunca antes vistas.

MK como los demás le dieron ese entretenimiento que ansiaba sentir. Por desgracia aun no siente nada como adrenalina o una emoción fuerte, pero estaba siempre abierto a cualquier cosa para hacerle sentir algo. Lo que sea.

... Pensando también en Wukong.

Sus pensamientos se detuvieron un momento, tan concentrado estaba en su mente ni se dio cuenta que había llegado otra vez a la playa. ¿Cómo no sintió bajar de la cornisa o del monito que regreso a su hombro? Hiromi se dio una nota mental en que debería dejar esa costumbre atrás.

Le dio un mejor saludo al monito, quien esté gorgojeo feliz al tenerlo de vuelta. Abrazando su cabeza con sus pequeños brazos y manitas, relajando los hombros tensos de Hiromi.

Sus ojos verdes indiferentes se encontraron con un MK que estaba moviéndose frenético por toda la playa, oyendo sus pequeños gritos o su rostro lleno de ansiedad. Curioso de porque ahora estaba preocupado, camino con lentitud como si tuviera el tiempo del mundo hasta estar un metro de distancia.