🩸Cap 22🩸

16 5 49
                                    

—Rydell, me gusta mucho. —acaricié su espalda. Ella tenía su cabeza sobre mi pecho.

—Patrick, hay cosas que debo decirte, pero que no puedo. No aún. —levantó su vista para mirarme— solo te diré que por ti siento muchas cosas que no puedo explicar con palabras. Estoy tan perdida como tú. —reí— Me gustó mucho esta noche. —besé su frente.

—A mí también, espero y se repita. —sus mejillas se ruborizaron.

—Ya debo irme, o mis primos vendrán por mí. —se puso su ropa.

—Ojalá pudiera amanecer contigo. —la abracé por la espalda y coloqué mi mentón en su hombro.

—Puede que un día despierte a tu lado, pero no será hoy. —plantó un pequeño beso sobre mis labios que me dejó deseando más— nos vemos en clase. —asentí y ella salió de mi dormitorio.

No puedo sacar de mi cabeza esa noche. Se repite una y otra vez, como si fuera una película. Fue real... Esa noche fue muy real para mí y puede que sea mi lado idiota, pero siento que para ella también a sido así. Pese a eso, a lo que siento, no puedo dejar de pensar también en las palabras de Íslam...

No eres más que un patético juego para ella

¿Me ha usado? ¿Ha jugado conmigo? Pero... ¿Por qué? ¿Cuál es el motivo?, son tantas preguntas que me están consumiendo y lo peor del caso es que, ni siquiera me ha escrito o buscado para aclarar las cosas. Yo no lo he hecho porque quiero que venga a mí, merezco al menos eso de su parte. Quiero ver si le importo lo que siento aunque, siendo sincero, creo que solamente me toca entender una cosa... Ella no me ama.

—¡Patrick!, Levántate o llegaremos tarde a clases. —Seth me arroja una almohada justo en el rostro.

—Maldita sea, ya deja de hacer eso. —hay sorpresa en su rostro. Nunca le había hablado antes así a mi mejor amigo— ¡Lo siento Seth! —me levanto y comienzo a vestirme.

—Descuida, sé que no fué tu intensión. —me agarra del brazo para que me detenga a mirarlo— Patrick, puedes contarme lo que sucedió. —no e tenido el valor de contarle a mi mejor amigo lo que ha pasado, así de mal me siento.

—Es nada más cansancio. —le sonrío y continúo vistiéndome.

—Eso espero. —dice no muy seguro de mis palabras— tu ojo amaneció mejor. Ya no está tan... —forma una línea con sus labios— hinchado, aunque está más morado que ayer.

—Entonces no está mejor. —camino hacia el espejo y observo mi mejilla. Sigue hinchada y mi ojo esta peor que antes, su último golpe fué con todo— que bueno que mi madre no me va a visitar por este mes, de lo contrario le daría un ataque al corazón al ver el dulce rostro de su pequeño. —ambos reímos.

Durante el examen de patología no logro concentrarme. He estudiado, me lo sé de memoria y... Basta con que ella me dé una mirada en pleno examen para qué olvide incluso respirar. Nunca me mira durante las clases y menos cuando esta junto a uno de sus primos, pero está vez lo hizo.

El profesor retira los exámenes y todos salemos del salón de clases. He reprobado, de eso no tengo la menor duda. Odio reprobar un examen. Odio manchar mi buen registro con una mala calificación y más cuando es un examen tan fácil como ese.

—Patrick. —sigo caminando por el pasillo— ¡PATRICK!

—¿¡Qué!? —giro mi cuerpo hacia ella de forma abrupta.

— ¿Podemos hablar? —inspecciona mi rostro sorprendida. Coloca su mano sobre mi mejilla y la acaricia con cuidado. Puedo ver preocupación en sus ojos o quizás me esta fallando mi vista. Su mano es tan suave que  le permito a mi piel sentir su calidez unos segundos antes de apartarla— ¿Qué te sucedió?

Voces en el Bosque (En Revisión)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora