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Haruto no era tonto, mucho menos idiota, era lo suficientemente inteligente para no demorarse mucho en darse cuenta que le gustaba Jeongwoo. Sabía lo que significaba todo aquellos sentimientos pues a sus cortos trece años lo había experimentado con una vecina de él en ese entonces, incluso aún recordaba su nombre; Lee Chaeryeong, era una muchacha de negros cabellos y blanquecina piel que siempre sostenía una sonrisa brillante pese al constante maltrato que sufría de su padre.

Por se mismo motivo Haruto tampoco se sentía del todo seguro, él había gustado de una niña muy bonita y alegre, pero Jeongwoo... Jeongwoo era un hombre, también muy simpático y siempre intenta hacerles saber que no es como los demás, pero el problema radicaba en que era un hombre.

¿Qué tan correcto es eso? Jamás supo de dos hombres besándose como ellos lo hicieron el día anterior, por ese mismo motivo se encontraba ansioso. ¿Pero cuanta era la posibilidad de que aquello estuviera mal? A su parecer parecía ser nula y a la vez demasiada.

Aunque así lo fuera, ¿sería correcto luchar por ello? Jamás nadie le dijo que no se podía, tampoco que sí, pero si fuera inaceptable ¿no le hubieran advertido desde pequeño sobre ello? Como aquellas veces en las que le prohibieron juntarse con su vecino del al frente porque parecía tener un problema que a su padre no le gustaba, pero en esta ocasión no lo hicieron.

La verdad es que le estaba dando muchas vueltas al asunto, aún más al ver lo tranquilo que el contrario hacia sus quehaceres del lugar. Haruto miró con suma concentración el rostro del contrario y no había algo que no le gustase, posiblemente en esos momentos no le debería de gustar lo sucio que está, pero aún así le gustaba, no le molestaba aquel detalle, incluso tal vez le parecía adorable la forma en la que su nariz se encontraba manchada y su mejilla tenía posada una mancha negra en forma de dedo por culpa del carbón que se encontraba retirando.

-¿Por qué me miras tanto? Ni en tus días más aburridos me mirabas tan fijamente- dijo Jeongwoo al sentir nuevamente la mirada de Haruto sobre su rostro, haciendo que este se avergonzara de su actuar.

-Qué dices, no te estoy mirando, no eres tan impresionante- contestó este, apartando su mirada de golpe.

-Tu mirada me dice lo contrario.

-Las miradas no dicen absolutamente nada, eso es un invento de los poetas de escritura romántica para que el lector caiga más rápido. Absurdo.

-Eso sí que es mentira, tu mirada dice muchas cosas, como por ejemplo, que le estás dando demasiadas vuelvas al asunto sobre lo ocurrido ayer.

-Mi mirada no dice eso, es algo obvio, ayer pasaron muchas cosas y como estabas ahí sabes que le doy vueltas a las cosas.

-Bueno Haruto, no es porque tu mirada me lo dijo- dijo con burla Jeongwoo-. Mejor dime qué te tiene así.

-Bueno... ya sabes, eso- respondió nervioso Haruto, bajando más su mirada, le avergonzaba hablar de ello.

-¿Eso? ¿Qué es eso?- dijo Jeongwoo, fingiendo demencia.

-Jeongwoo- reprochó Haruto con su ceño fruncido.

-Llorón- lego de decir eso Jeongwoo juntó sus labios con los de Haruto en su suave baile, ahora con más experiencia.

Sus corazones palpitaban con rapidez, no solamente por aquella acción que hacía sus mundos dar un giro, sino que también sentían el nervio de ser descubiertos, ninguno sabía que tan malo o bueno era, pero sabían que era diferente y que la gente se podía tomar muy bien o muy mal lo diferente.

Cuando se separaron Jeongwoo le sonrió a Haruto y le dio nuevamente un casto beso para luego seguir con sus actividades de la tarde.

-No le des tantas vueltas, solamente disfruta que somos tú y yo, nadie más.

Sin más Jeongwoo dejó el lugar mientras que Haruto sostenía más grande su sonrisa, después de todo había algo de razón en las palabras del más bajo, solamente eran ellos, no debía porque meterse más gente. Igualmente aquello le recordó la vez que le dijo algo parecido a Jeongwoo.

"Si nadie se entera no debes de temer."

Aunque ya todos sabían que Jeongwoo había roto la única regla que no tenía que romper.


























Actu xq adivinen a qn le llegó inspo y tya terminó de escribir todo el libro 😸 exacto, a mí, igual lamento q sea cap cortito, tampoco m llegó tanta inspiración KNWKFNSKS MENTIEKS

CircusDonde viven las historias. Descúbrelo ahora