Un chico besa a otro || Perciver

3. Entrenamiento

Percy Weasley pasó toda la semana buscando la forma correcta de decirle a Oliver que en realidad no quería entrar al equipo de Quidditch y que solo había dicho que sí porque había estado fantaseando con él pidiéndole una cita o un beso. Spoiler: No hay una forma correcta de decirlo. 

ㅡEntonces… ¿Aceptaste entrar al equipo porque te dejaste influenciar por su cabello alborotado y sus ojos cafés miel? ㅡpreguntó Penny, con una ceja arriba. 

Percy se sonrojó y asintió, haciendo estallar en carcajadas a su amiga. 

ㅡ“Oliver y yo solo somos amigos” ㅡrespondió la rubia, haciendo esa voz chillona. 

ㅡ¡Ya te dije que yo no hablo así! ㅡreplicó ㅡ. Y lo sé, soy un estúpido que se enamora de cualquiera que le de atención, soy leo, ¿sabes? 

ㅡCómo sea. Tienes que encontrar una forma de librarte de entrar al equipo, ¿has visto a esos chicos? Siempre huelen mal y son tan pesados, diciéndose “compañero” todo el rato. Dios mio, son la versión fifas del mundo mágico. 

ㅡOliver no huele mal ㅡaseguró Percyㅡ, y te recuerdo que mis hermanos están en el equipo. 

ㅡ¡Exacto, pruebas mi punto! 

Percy sonrió. 

ㅡOliver tampoco me dice “compañero”, siempre es solo “Perce”, y ni siquiera se que son “fifas”. 

ㅡOh, humor muggle ㅡdijo Penny restándole importancia ㅡ. A lo que voy es que todos ellos son tan distintos a nosotros, no creo que encajes. No quiero que se repita lo de cuarto año. No quiero que vuelvan a hacerte daño. ㅡfinalizó su amiga, con una mirada triste. 

Percy le pasó un brazo por los hombros y la atrajo hacia sí. 

ㅡNada de eso pasará. Soy fuerte ahora, Penny. En cuanto vea las señales me alejaré y marcaré límites, lo prometo. 

Penny asintió y escondió su rostro en el cuello de Percy. 

Penny y Percy eran lo que conocían como “amores platónicos”. Durante cuarto año habían creído que estaban tan enamorados que hasta comenzaron a salir. Claramente eso no funcionó, porque ambos resultaron ser tan queers; Percy se encontró teniendo un fuerte crush con un Ravenclaw que era comentarista  y Penny por una jugadora de quidditch de Slytherin; ambos pasaron ese año teniendo interminables “citas” en los partidos. 

De todas formas, Percy siempre iba a estar un poco enamorado de ella. Tal vez no de manera romántica, pero lo estaba, y sabía que Penny sentía lo mismo por él. 

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La mañana siguiente, Oliver lo interceptó a la hora del desayuno. 

ㅡ¡Perce! ㅡdijo alegremente ㅡ. Te estaba buscando, tengo el horario de entrenamientos. 

ㅡHola, Oliver ㅡrespondió el pelirrojo, tomando la hojaㅡ, sí, sobre eso… 

ㅡ¿Pasa algo? 

Percy observó por un instante el horario en sus manos. 

ㅡNo pensé lo suficiente antes de aceptar entrar al equipo ㅡsoltó de golpeㅡ. Quiero ayudar porque eres mi amigo, pero tengo tantas clases extracurriculares y son tan importantes como mis clases normales, y viendo el horario ahora, los entrenamientos chocan con Runas, sin mencionar que soy malísimo en deportes y no quiero decepcionarte en nada. 

Oliver se quedó en silencio unos segundos. 

ㅡOh, Percy, ¡no hay problema! ㅡOliver hizo un movimiento despreocupado con su manoㅡ. No tienes que hacerlo si no quieres. Y para nada me decepcionas ㅡrecalcó.