La vida da muchas vueltas, es como un libro, nunca sabrás que podrá suceder. Ese fue el pensamiento que siempre llevo Chiara, una chica que amaba bailar y disfrutar de su vida a pesar de todo. Pero que raro es el camino no? Terminar enamorandose de...
Una nueva semana, otra nueva fase. Chiara hoy estaba en cama, si tuvo una noche muy larga. Su madre aún no llegaba del trabajo, y la menoe había estado mal de salud. No se levantó en ningún momento, tenía la fiebre muy alta y había vomitado todo lo que se suponía que había comido el día anterior.
La chica estaba dormida, había logrado conciliar el sueño a eso de las 4 d ella mañana, en todo ese tiempo ni quizo contestar los mensajes que le llegaban pues no tenía la energía ni mucho menos la voluntad de hacerlo, solo que le escribió un "Buenas noches lindo, descansa " a Maggi pues sabía que se preocuparía demasiado.
Para este momento la menor comenzaba a sudar frío, y su temperatura mejoraba. Llevaba eso de dos semanas sin sus medicamentos, y había podido soportarlo pero desde ayer no, las cosas se complicaron demasiado. Ya no podía más, a este punto solo le quedaba descansar y esperar mejorar.
Los rayos de luz comenzaban a asomarse, empezando hacer que la chica reaccionara, esta se removió un poco adolorida y con la poca fuerza que le quedaba se sento delicadamente en la cama, aún con los cerrados dejo un suspiro pesado. Apenas abrió los ojos sintió una gran punzada en el lado derecho de su cabeza, era migraña.
-Carajo... -Murmuro agarrando entre su manos su cabeza, la cual palpitaba -
Busco entre las sábanas su celular, puso sus manos moviendose entra la cama, hasta que podían se topó con el aparato, lo agarro y lo encendió, pues ayer apenas mando el mensaje a su novio, lo apago. Al ver que ya estaba encendido, vio dos cientos de mensajes de su madre y sus amigos, al ver la hora abrió los ojos asustada. Eran ya casi las 9, la escuela ya había empezado.
Intento levantarse para irse a vestir, pero apenas puso un pie en el suelo cayó al suelo. Todo comenzaba a dar vueltas, y su vista era nubla. Sabía que en cualquier momento se desmayaria, así que no espero más y llamo a su madre.
Hija? Hola ya voy llegando, es que hay un poco de tráfico por aquí
Mamá... No me siento muy bien -Su voz comenzaba a debilitarse al igual que su cuerpo -
Chiara? Que tienes hija, que sientes??
Es que yo - Volteo su vista al techo y este no paraba de dar giros, se agarro la cabeza y cerró los ojos con fuerza - Ven rápido...
Y sin más arrojó el celular a la cama, e intento levantarse pero todo seguía dando vueltas. Agarro su cabeza pues la migraña seguía y cada vez más fuerte, pero de un momento a otro todo se detuvo. Su respiración se hizo pesada y todo parecía ser más nublado, la chica cayó al suelo y se desplomó en su alfombra de color gris, no pudo ver más allá de como todo se volvía negro. Y sin más.
Chiara se había desmayado.
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