#MicroStony #Stony #SteveTony Cuando entreabrió perezosamente los ojos y vio que eran las diez de la noche, Tony se sintió de repente desubicado y muy mayor. Un sábado por la noche y él roncando en el sofá. Lo normal sería que estuviera preparándose para irse de fiesta por ahí.
Sintió una mano peinando suavemente su cabello y el perfume a vainilla le siguió con rapidez. Se dio cuenta de que no estaba sobre ningún cojín, sino sobre la pierna cubierta de un espantoso pantalón a cuadros de Steve.
Tony no entendía cómo se las apañaba para oler así, pero era tremendamente tranquilizador. Se movió para estar más cerca de su mano sin darse cuenta, igual que un gato buscando mimos.
Escuchó la suave risa de Steve y suspiró.
Puede que fuera mayor ya para esas fiestas, puede que no, pero definitivamente salía ganando con el cambio.
