Los Siete OS de la Familia Tang

Capítulo 69

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Todos en las ventanas emergentes no pudieron evitarlo más:

[Ai yo, este intrigante An, mi tonto fufu 1 Yuan Bao ha sido secuestrado así para la próxima cita.]

[Tendré que darle a mi hijo una guía de relaciones cuando le dé un regalo en el futuro, tengo que enseñarle cómo tener una relación, para que no pueda ser engañado tan fácilmente ah.]

[La próxima vez que vengan a jugar, ¿pueden encender la transmisión en vivo también? De lo contrario mami no puede relajarse.]

[¿Qué te preocupa cuando tus hijos se enamoran? Tienes que ser generosa como suegra, no te metas en las relaciones de tus hijos, dales libertad.

[¡Eres la suegra! ¿De verdad crees que los fanáticos de las esposas no existen? ¡Estamos demasiado amargados para decir algo!]

[Los fans de Girlfriend también son demasiado amargados para hablar.]

[Los fanáticos de Mei Mei 2 se han convertido en espíritus de limón.]

[Los fanáticos de Jie Jie 3 están amargados hasta que lloran.]

……

El camarógrafo que lleva la cámara expresa que él también está amargado hasta el punto de las lágrimas, ¡lo hará hasta que esté de vacaciones y luego también llevará a su esposa al parque de diversiones! Quiere compensar toda la comida para perros que le metieron con fuerza en la boca hoy.

Cuando Gu An y Tang San Yuan estaban casi en la puerta, Gu An miró la máquina grúa no muy lejos y de repente dijo: "Espérame".

Fue a comprar algunas monedas del juego y se dirigió a la máquina grúa para agarrar las muñecas.

Tang San Yuan se quedó atónito por un momento y lo siguió rápidamente. La máquina grúa estaba llena de muñecos de conejo, uno más lindo que el otro, y él los miró fijamente a través de la ventana de vidrio. Cuanto más los miraba, más le gustaban.

Los deseaba tanto ah... Tang San Yuan miró a Gu An.

Gu An no pudo resistirse y se rió, luego se centró en la máquina grúa. Primero manipuló el joystick para tratar de atraparlo unas cuantas veces y, sin excepción, todas salieron vacías.

Gu An suspiró y giró la cabeza para mirar a Tang San Yuan, "¿Puede Xiao San Ge animarme un poco?" En realidad quería un beso de la suerte, pero tenía miedo de asustar al conejito.

Tang San Yuan parpadeó, pensó por un momento, luego se puso las orejas de conejo en la cabeza y dijo muy seriamente: "El conejo traerá buena suerte".

Gu An enganchó las comisuras de los labios y asintió con seriedad, girando la cabeza para mirar la máquina grúa y volver a agarrarla.

Esta vez Gu An pareció haber captado el patrón, y finalmente atrapó el primer conejo bajo la atenta mirada de Tang San Yuan, atrapar muñecas después de eso fue mucho más fácil.

Tang San Yuan observó cómo atrapaba uno, dos... tres.

En realidad atrapó tres, Tang San Yuan le tenía envidia, él también lo quería, pero desafortunadamente no es hábil para atrapar muñecas, había jugado varias veces antes y cada vez que no podía atraparlo.

Gu An de repente dejó de moverse y no atrapó más, en cambio enderezó su cuerpo, pareciendo que no quería continuar.

Pero sus monedas de juego aún no se han agotado, ah, Tang San Yuan no pudo evitar señalar un conejo en la esquina, frunció ligeramente los labios y dijo: "Este es muy lindo..."