Eran las 4 p.m y nuestro rubio se dirigía hacia la empresa Uchiha en su camioneta, una Ford Raptor 2022 de color rojo metálico.
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Mientras realizaba el trayecto de su casa a la empresa, se encontraba escuchando música en una estación de radio japonesa dedicada a la música mexicana que se encontraba en tendencia. Con las canciones que iba escuchando y la camioneta, Boruto parecía un traficante. El rubio cantaba a todo pulmón las canciones que pasaban en la radio, una de ellas en especial era su favorita y le subió todo el volumen, lo que ocasionó que las ventanas de los demás autos comenzarán a vibrar con el bajo que ocasionaba la canción, los conductores se impresionaron de lo bien que se escuchaba el sonido de la camioneta.
Boruto le encantaba tanto la canción que quitó la radio y conecto el Bluetooth de su teléfono y puso la canción para poder repetirla las veces que se le antojaron.
Al llegar a la empresa, Boruto se estacionó en frente de las escaleras de la entrada. Todos los empleados que se encontraban afuera vieron con asombro el tamaño de la camioneta y lo bien que se escuchaba la canción. Entre todos los presentes se encontraba Shin, quien miraba a Boruto con un desprecio tan grande y también envidia ya que Boruto tenía buenos autos y esto hacía que Shin le diera mucha rabia. Boruto portaba un pantalón negro, una camisa blanca, una sudadera negra y una gorra negra y desde su cómodo asiento logró ver a Shin y rápidamente se dio cuenta del odio que había en su mirada, esto no le importó a Boruto quien solo apagó su camioneta y se bajó.
Al bajar de la camioneta se dirigió hacia la entrada, Shin igualmente se dirigió a la entrada y al llegar ambos se toparon con Sarada quien estaba hablando por teléfono. Al encontrarse los tres solamente se miraron. Shin tenía una mirada de odio hacia ambos, Boruto simplemente tenía una expresión despreocupada y Sarada miraba con miedo ya que ambos estaban ahí juntos.
Sarada: Hola.
Boruto: Que onda.
Shin:....
Boruto: ¿El niño está enojado?.
Shin: Que te importa.
Boruto: Jajajaja, aceptalo, ella solo salió contigo por cortesía, si tu te ilusionaste fue tu error, así que deja de enojarte y devuelve el saludo.
Estas palabras dejaron impresionada a Sarada, quien vio al rubio y se sonrojó.
Shin: No tengo por qué hacerte caso.
Boruto: Jajaja, creeme que si, si hoy sale bien todo, el día de mañana ella va a ser tu jefa, así que si quieres conservar tu trabajo, será mejor que te comportes y dejes de hacer dramas.
