for fun

una jaula de oro, para la real prisionera

Las alertas estaba altas, los diseños bélicos que se desarrollaron a raíz de tantos saberes benévolos fueron finalmente paridos por las gigantes fábricas, que enviaron los suministros a los rincones más lejanos del imperio
Los policías bonachones que cuidaban las ciudades y pueblos, pronto dieron la bienvenida a soldados, hechos y derechos, especializados en defensa, inteligencia y respuesta, jamás en ofensiva o masacre
La sola quitina de cualquier soldado era suficiente para detener balas , las armaduras entregaban utilidad en el campo de combate, desde escudos desplegables, paneles de recarga para las armas de energía, ampolletas inyectables llenas de analgésico, regenerativos, adrenalina y antibióticos, a polos de nanotecnología en cada placa de la armadura, que cumplían funciones de mantenimiento, soporte vital y formar herramientas de toda clase para cualquier situación

Cada unidad en las filas eran entrenadas en combate cuerpo a cuerpo, antes de siquiera levantar el filo de una hoja
Adiestrados en supervivencia, y medicina en armas y mecánica, en mantenimiento y pilotaje
Cada ser era puesto a prueba frente a lo peor de lo peor, enseñando a qué ante todo debe imperar la humanidad y el servir, cada unidad era probada para abatir trescientos contrarios antes de caer, salvar al doble antes de caer de cansancio
No era necesaria la disciplina mecánica, ni el terror, era indispensable la voluntad, la disposición y el sacrificio
Incluso los mandos eran los primeros en las filas, pues no llegaban por antigüedad ni por méritos, se ascendía con honor
Eran verdaderos  héroes y heroínas

El entrenamiento debía durar lo menos posible, con dos años después de enlistarse eran suficientes para curtir a tropas dignas de ser capitanes cada uno
Pero por más listos que estuvieran para entregar sus vidas, no estuvieron jamás listos para el primer encuentro

Ocurrió cuatro años después de saber de la existencia del enemigo, en la superficie de un planeta llamado  teremus 3 de teka, nombrado así, por la sección donde existe, la nebulosa  teka, la estrella que órbita, teremus, y su posición en la órbita, el tercer planeta de su sistema

En su superficie, había riqueza de minerales, su estrella, una enana blanca que ya no podía sustentar vida a su avanzada edad
Las colonias mineras y agrícolas fueron asediadas, no por humanos, sino por una plaga carnívora, de aspecto esculaido y desnutrido, pero más ágiles y brutales que el mejor depredador conocido, avanzaban en cuatro extremidades, equilibrados en con una huesuda cola serpentina
Las balas físicas rebotaban sobre la templada piel ennegrecida por la ceniza de esa tierra, valiéndose de colmillos y garras, y una gran lanza en la punta de la cola

Su ataque sorpresivo e implacable fue sobrevivido, pero encendió nuevas alarmas que necesitaba respuesta inmediata

El consejo, conformado por Zeettha,  ocho analistas, siete comandos, dice soldados que participaron en la resistencia del asedio, y los trabajadores que se vieron afectados

Se di ron los testimonios, de soldados y civiles, y como primera teoría se planteo que no se encontró esa especie antes en el planeta, y la minería los había molestado

Los analistas refutaron, ni la estrella no el planeta daban abasto para esa forma evolutiva, un cazador sin presas no sería tan capaz en la pelea

El segundo encuentro se vio en Animux de Tiros, un planeta único que albergaba a un puerto, el planeta era solo el ancla de bases elevadas desde donde se hacía comercio y almacenamiento de materias que no podían ser transportada de otra forma, tales como colonos, alimentos y recursos médicos

Ese ataque fue lo que despertó las reales razones, los entonces nombrados "segadores" estaban presentes en dos planetas separados por años luz, alguien los llevo como tropas baratas y eficaces
Ambos buscaron inhabilitar puntos esenciales para la utilidad, y ambos usaron un embate relámpago para ese fin