Parte 7

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Yo ahora puedo darme ánimo, años después, y tratar de tener la iniciativa de responderla, sólo para dar el cierre a su muerte.

"Quizás algún día deje de quererlo, aunque siga queriéndolo más allá de la muerte; y acaso no comprendan en esa despedida, que, aunque el amor no une, nos separa la vida".

-Siempre tuya, Katerina Petrova
Kiev, Rusia-1951

Meses después ella muere, a sus 73 años, por vejez y con síntomas de Alzheimer, dándole un cierre a esta historia. Excepto por el hecho de que años después, sus hijas encuentran todas sus famosas cartas y aunque su historia haya muerto en carne y hueso, permanecerá siempre en la memoria de Rebekah y Yelena Ivanov Petrova

Una historia para recordar Donde viven las historias. Descúbrelo ahora