Los cachorros de Tomioka

No toquen a mis cachorros

Tomioka, bajo amenazas de Shinobu, sólo veía con impotencia el como Obanai sometía a su cachorro para que no defendiera a su hermana, mantuvo la calma por que ya le había dicho a sus alfas que tenía cachorros y estos tenían su olor impregnado, pero al ver como Sanemi atravesaba la caja de su cachorra empezó a molestarse.

-Ven demonio- ordeno Sanemi cortando antebrazo.

Al ver esto y saber lo que podía ocurrir, Tomioka ignoro las amenazas de Shinobu y se paró frente al alfa, para que no lastimara a la menor, pero Sanemi lo empujó haciéndolo caer al suelo.

Nezuko salió de la caja y lo vio molesta, pero al sentir el olor de la sangre sus instintos le pedían comer, los ignoró al ver como el omega, que la había reclamado como su hija, era empujado por el alfa frente a ella, no lo dudo y pateo con toda su fuerza al alfa y corrió al lado del omega mayor.

-¡Tomioka¡- grito asustado el alfa al pensar que lo lastimarian por su idiotez.

Entre los pilares un alfa rubio también se alarmó al ver que sería el objetivo de la demonio.

-Estoy bien, no te preocupes cariño- dijo Giyuu acariciando la cabeza de Nezuko sonriendo levemente.

Los pilares lo veían desconcertados y aterrados, Tomioka había sonreído.

-Estas bien?- pregunto Tanjiro acercándose, había aprovechado que Obanai se había distraido.

-Si- respondió Tomioka. 

-Giyuu- Sanemi se acercó, pero Nezuko le gruño y mostró sus garras.

-Tranquila, duerme- pidió Giyuu.

La demonio se dirigió a su caja y la jalo hasta donde estaba el omega pelinegro.

-Tomioka- habló Rengoku.

-No digas nada... Oyakata-Sama me llevaré a mis cachorros, Tanjiro esta herido aún- habló Giyuu ignorando a los pilares y haciendo una reverencia.

-Esta bien Tomioka, informame cuando se recupere- habló el alfa pelinegro.

-Me retiro- dijo antes de poner la caja de Nezuko en su espalda y ayudar a Tanjiro a caminar, Tokito lo siguió sin que el resto se diera cuenta.

Los pilares dirigieron su vista a Oyataka-sama en busca de respuestas, pero este sólo sonrió. 

-Sabia de esto?- pregunto Uzui viendo como se iba el pelinegro con los tres niños.

-Si, Tomioka me lo informo personalmente, Urokodaki-San y Tomioka darán sus vidas si Kamado Nezuko lástima a alguien- dijo sin dejar de sonreír.

-Porque lo oculto?- pregunto Shinobu, sabía que los omegas sufrían si no podían proteger a sus cachorros y Tomioka había visto como apuñalaban y golpeaban a sus cachorros sin poder defenderlos por sus amenazas.

-Lo sabian?- pregunto Uzui a Sanemi y a Rengoku.

Cuando el ambos no respondieron lo tomaron como un no.

-Se preguntarán el porque Tomioka reacciono asi- dijo Oyakata-Sama.

-Lo oculto- gruñó Sanemi, sabía que el pelinegro tenía cachorros y ya habían planeado que los conocerían cuando sus cachorros volvieran de sus misiones, pero nunca imaginó que tendría a un demonio como cachorro.

-Me ha informado sobre sus cachorros, siempre que adopta a uno me lo informa personalmente- hablo con calma el pelinegro.

-Shinobu, podrías atender a los hijos de Tomioka?- pregunta Oyakata-Sama.

-Lo haré- responde Shinobu.

En la finca mariposa estaba Aoi peleando con Zenitsu para que tomara su medicina, también había una chica pelinegra viendo como el rubio se negaba a tomarla, después de varios minutos salió al patio para ver las mariposas.

Cuando vio al pilar del agua acercarse cargando a Tanjiro y la caja de Nezuko corrió hasta él.

-Mamá- susurro Kanao abrazando al Omega mayor.

-Kanao, podrías ayudarme con Nezuko?- pregunto Giyuu.

-...- Kanao asistió después de meditarlo unos segundos.

-Estas mejorando, sigue esforzándote en tomar decisiones- felicito Giyuu dándole la caja de su cachorro.

-Tomioka-Sama, entren- dijo Aoi cuando vio al pilar.

Aoi vio con extrañeza a Kanao cuando entro con una caja en sus manos y dirigirse hacia una habitación cualquiera y después buscar cortinas y sábanas.

En el patio de la finca mariposa Tomioka estaba sentado bajo un árbol mientras uno de sus cachorros dormía en su regazo, Aoi se acercó.

-Estarán bien?- pregunto Giyuu.

-Solo necesitan descansar- responde Aoi.

-Tomioka- la voz de Sanemi hizo que el Omega se tensara.

-Shinazuwagua-Sama bienvenido- saludo Aoi haciendo una reverencia antes de retirarse.

Tomioka lo ignoro mientras acariciaba el cabello negro de su cachorro que empezaba a despertar.

El alfa empezó a molestarle el beta que dormitaba en el regazo de su omega.

-Alejate de mi omega- gruñó Sanemi usando su voz alfa, tomandolo de la yukata y lanzándolo contra la pared.

-¡Genya!- Tomioka trato de correr hacia su cachorro pero fue detenido por el alfa.

-Tenemos que hablar, ahora- gruñó Sanemi.

-No tengo nada de que hablar contigo y esta es la última vez que tocas a mis cachorros- responde liberándose del agarre.

Sanemi se quedó petrificado al escuchar lo que dijo Giyuu.

-Estas bien?- la suave y preocupada voz de Giyuu mientras ayudaba a Genya a ponerse de pie molestó a Sanemi.

-Que quieres decir con tu cachorro?- pregunto enfadado el peliblanco.

-Genya es uno de mis cachorros... Creí que al ser tu hermano lo aceptarías con más facilidad que al resto pero veo que me equivoque... Esto no funcionará, será mejor que dejen de cortejarme- el Omega bajo la cabeza con tristeza y decepción.

-No estás hablando en serio- fue lo único que dijo Sanemi.

-Hablo muy en serio, jamás pondré a un alfa por sobre mis cachorros- Tomioka cargo a Genya en su espalda dejando al pilar del viento en el patio.

-Lo siento- susurro Genya con culpa cuando se alejaron lo suficiente del alfa albino.

-No te preocupes, en algún punto se habrían aburrido de mi... Después de todo no soy como se suponen que deben ser los omega- dijo el pelinegro, le agrado el tiempo que tuvo la atención de los dos alfas que le pretendían, pero sus hijos estaban primero.

-Si no nos hubieras adoptado no tendrías esos problemas- dijo el cachorro pelinegro.

-Nunca vuelvas a decir eso, ustedes son lo único que tengo, la única razón para seguir vivo- dijo con seriedad Giyuu.

Genya era su primer cachorro, recordaba claramente como lo había encontrado en el bosque, solo y desangrándose, había tenido que cuidarlo y llevarlo repetidamente con el medico por sus heridas, al principio se había negado que entrara al cuerpo de cazadores, pero había tomado el examen a escondidas y había regresado con la muñeca rota, días después se enteró la razón lo que lo llevo a un castigo de dos semanas y disculparse con Kanata-chan.

El menor solía tener un carácter similar al del pilar del viento, demostrando que eran hermanos, pero al mismo tiempo eran completamente diferentes, Sanemi era un alfa dominante y Genya era un omega recesivo, Sanemi era impulsivo y Genya solía meditar antes de actuar algunas veces; con ayuda de muchos años de meditación con Himejima y la más notoria Sanemi sabía usar la respiración y Genya no, por más que lo intentará no podía y eso le deprimia.