Reencarnada en la Villana

Capítulo 13

Capítulo 13:

¡Riujy!

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- ¡Aluacaaaaard! - me asuste al cruzar la mirada con esos grandes ojos

Ante mi grito la tierna y pequeña criatura soltó mi pie y se escondió debajo de la cama

Asome mi cabeza y vi esos ojos verdes esmeralda que me parecieron muy tiernos y bellos, baje de la cama y me senté en el suelo

- Ve aquí, no te haré daño - hice un gesto con las manos para que se acercara

Casi me derrito al ver aquella criatura tan bella, tenía el cuerpo cubierto de escamas blancas y brillantes como perlas, los ojos esmeraldas y  dos pequeñas alas se asomaban en su lomo

¡¡¡Era tan tierno!!!

Lo tomé en brazos y le empecé a hacer cosquillas en la pancita mientra me ponía de pie

- ¿Sara? - Alucard se asomaba en la puerta seguido por todos los demás quienes no podían creer lo que veían- Es... es hermoso, es un dragón - Alucard se acercó y tomó al pequeño dragón en sus manos

- ¡Es... un dragón! - Laura abrió los ojos como platos

- Es muy tierno - Clarisa se acerco y le arrebato el pequeño a Alucard y empezó a jugar con él

- Es mi hijo - las palabras se escaparon de mi boca sin pensar  y todo me miraron

Al fin y al cabo yo lo había creado y sentía una gran atracción hacia él, sentía que era una parte de mi

- Soy tío de una bestia - mi hermano estaba conmocionado

Adrian solo podía reír y burlarse de mi hermano,  Liam se mantenía en silencio y sin que lo notaramos se marchó

-¿Como se llama? - preguntó Clarisa mientras lanzaba al pequeño por los aires

- Riujy - mi semblante se volvió triste, al final no pude salvar a Sara. Pero nunca la olvidaria

- Mañanada luego de la cena, en la biblioteca comenzaremos a practicar y no olvides traer al pequeño,  el es tu fuente de magia ahora. Por ahora descanza y recuperate. Yo tengo que habizar a la torre de que ha nacido un quinto dragón

Todos se marcharon y quede sola con Riujy

- Son simpaticos, pero tu novio no  se marcho sin decirles

- ¿Enserió? - mire a la puerta tratando de hacer memoria ¿Un segundo de donde venía esa voz? - ¿Quién dijo eso? - salte sobre la cama

- Eh sido yo - mire a mi lado y solo vi al pequeño dragón

- ¡¿Tu... tu hablas?! - salte fuera de la cama

- Claro que hablo ¿Has visto un dragón que no hable? - bajé de la cama y poco a poco se fue acercando a mi

- La verdad no he visto ningún dragón - lo tomé en mis brazos y me senté en la cama

- Pues ya era hora - era muy tierno - Me gustas  - se acomodó en mis brazos

Estaba agotada, así que tomé una siesta bastante larga. No podía parar de pensar en Sara y me sentía muy mal por haberle fallado

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Las horas pasaron a mi parecer demasiado rápido ya era hora de la cena. Ya habían pasado varias horas pero para mi se sentían como unos pocos minutos