Reencarnada en la Villana

Capítulo 25

Capítulo 25

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Literalmente me sentía como si estuviera en Harry Potter, en mi otra vida siempre había soñado con ir a Hogwarts y ya se que no es la increíble academia de magia pero se sentía increíble estar aquí

Vagaba como tonta por todo el salón, observando cada escultura y pintura que adornaba el lugar

Damian me observaba y trataba de aguantar la risa, no lo culpo, con la cara de idiota que seguro llevaba plasmada mientras pegaba mi rostro a las vitrinas, yo también me burlaria de alguien en mi situación

- Bien... es hora de irnos, debo anunciar tu llegada e informar al castillo de tu reclutamiento - me tomo por la mano y me sacó del deslumbrante salón

- Sigo pensando que Liam te matará por traerme a éste lugar- se detuvo derrepente provocando que chocará contra él

- Tranquila no le quiero robar a su emperatriz, solo prepararla para que se sepa defender y deje de ser una niña tonta - me dio unas palmaditas en la cabeza y no disimulo su tono sarcástico

- ¿A quien llamas niña? - respondí ofendida

- A ti - me soltó la mano y saltó por la ventana

Corrí hacia la ventana y me asomé para ver si se había muerto pero solo se veía el mar y no había señal de que alguien hubiera saltado a él

- Ves eres muy fácil de engañar. Eso que acabó de hacer era una ilusión - la palabra arrogancia estaba escrita en toda su cara - Vez, eres tonta - me pasó por el lado y continuó su camino y yo le seguí gritándole cualquier tipo de insultos

Aunque he de admitir que su truquito me impresionó

Continuamos bajando escaleras hasta llegar a otro salón donde estaban reunidos muchos chicos..
Y cuando digo chicos me refiero a que eran a penas mayores que yo

Siendo sincera, parecía que había entrado en una maldita convención de Adonis 

El lugar era algo así como un tipo de sala común y solo faltaba que entrará Macgonagall con el sombrero seleccionador a asignarnos una casa y Dumbledore a darnos un discurso de bienvenida

Todos me miraron extrañados, como si nunca hubieran visto a una chica y susurraban algo entre ellos

-¿ Por qué me miran como si nunca hubieran visto a una chica?

- Porque muchos de ellos nunca han visto a una

Lo miré y los ojos se me querían salir ¿Cuanto tiempo llevan aquí?

- ¿Como es eso posible?

- Los magos somos personas poco comunes y los demás temen nuestro poder. En pocas palabras la mayoría de estos chicos son huérfanos, pero con un gran futuro en la magia. Así que los aislamos hasta que tienen edad suficiente para valerse por sí mismos o por otro lado pueden quedarse aquí en la torre

- ¿Y por qué no hay chicas?

- Las hechiceras son mucho menos comunes, son muy pocas las chicas que nacen con el don de la magia y por eso las enviamos a una torre a parte. Un lugar más agradable, donde pueden desarrollar sus dones en mejores condiciones. Después de todo son chicas

- Entiendo... ¿Y porque me has traído aquí y no a la torre de chicas? - Una sonrisa torcida se formó en su rostro y la piel se ne erizó

- Porque quiero molestar al emperador- se acercó tanto a mí que mi corazón se aceleró -Además no hay nadie más apto que yo para enseñarte magia - se dio la vuelta y salió del salón