The New Girl

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El semestre había concluído de forma repentina. Observaba desde el tejado de la torre más alta a todos los alumnos con equipaje en mano llenando los pasillos de la escuela y la salida. Inconscientemente buscaba a la directora Weems entre ellos despidiéndose o al menos verla a través de la ventana de su despacho recordando de golpe que ya no se encontraba con nosotros en este plano terrenal. Puedo culparme en muchas maneras como también puedo culpar a alguien más cuando la verdad es que ninguna de las dos la tiene. Las cosas suceden por algún motivo a veces fuera de nuestro alcance. La verdad es que pude evitar empeorar las cosas si tan solo no hubiera tomado decisiones desesperadas. Se preguntarán qué hago en el tejado en lugar de estar despidiéndome de mi manda y de los demás miembros de Nevermore, bueno, lo hice a la orilla del lago frente al sepulcro de Joseph Crackstone en la madrugada mientras me desangraba.

Meses antes...

—Dime, Cirila, ¿sigues teniendo pesadillas referentes a esa noche?— El de la Dra. Kinbott consultorio blanco y beige contaba con buena iluminación, ordenada, limpia y espaciosa. No es para quejarse, pero sí es incómodo para alguien que se encuentra más familiarizado con colores oscuros y lúgubres como el negro y el color rojo, pero no el rojo normal al que uno está familiarizado con las pinturas o los crayones en sí, sino que el color rojo carmesí de la sangre que no está demás decir que su saber es peculiarmente delicioso, al menos el de los animales que he cazado con mi forma licántropa. —Sabes que todo lo que hablamos aquí es confidencial. La directora Weems no se enterará ni estará en tu expediente— Me encuentro en este consultorio porque el internado me lo pide luego de tantas cosas que he pasado en mis anteriores escuelas sobrenaturales donde nunca pude encajar por ser, ahora, la única trihíbrida que se ha dado a conocer.

—No es lo único que observo al cerrar los ojos— Con el tiempo he aprendido ciertas cosas cuando tengo estas reuniones que solo empeoran mi salud mental —Mi vieja casa en llamas. La misma infraestructura ardiendo en las llamas que obstaculizaba el paso. Mi hermano al otro lado de ésta paralizado por el miedo. Sentir la escasez de oxígeno a cada segundo. La desesperación e impotencia del momento— Una de las cosas que he aprendido es que nunca debes mostrar tus sentimientos ante nadie ni el más simple gesto —En ocasiones estoy sola en ese lugar rodeada de varios cuerpos, cubierta de sangre que puedo saborear. Escucho los aullidos. Por la ventana observo la hermosa luna llena en un cielo despejado. Los lamentos provenientes de los cuerpos, sus súplicas, son... como música para mis oídos— sé muy bien que la pobre humana trataba de ocultar su miedo a mis confesiones, pero la mirada lo dice todo —Luego estoy en el sepulcro de ese tal asesino Joseph Crackstone. Admiro su tumba sintiendo todo ese sufrimiento que lo llevó a su muerte— suspiré con una sonrisa pacífica —Era como una especie de satisfacción para mí saber que hombres como él murieron de la peor manera en consecuencia de sus actos contra los excluídos

—Disfrutas el sufrimiento de otros— asentí sin mostrarle tanta importancia lo que complicó mis asuntos —Cirila, seré franca contigo— exactamente empeoré las cosas, pero ella quería sinceridad ante todo —Me complace saber que ya no sufres por las noches, pero me aterra el hecho de que disfrutes este tipo de cosas. El hecho de dañar a otros

—No me diga que me cree capaz de hacerlo porque no soy como mi madre

—Claro que no— la había puesto nerviosa. La forma en que restregaba sus manos por sobre sus muslos lo decía todo —Pero al mismo tiempo que indica un avance también demuestra un retroceso— rodé los ojos —¿Tu sed por la sangre humana no ha... despertado por así decirlo? Conscientemente hablando

—No a pesar de que estoy rodeada de vampiros durante el almuerzo y... estar demasiado tiempo con un humano

—¿Y no has considerado despertar ese lado?— creo que negué expresando miedo a la idea de hacerlo —Podrías intentar al menos con sangre animal para acostumbrarte poco a poco...

Vendetta | Wednesday NetflixDonde viven las historias. Descúbrelo ahora