Un Soldado Espacial - Ab Origine

Capítulo XIV

Han pasado aproximadamente cuarenta minutos desde que los purificadores entraron en combate con Gladio y sus compañeros, y ahora mismo les están buscando por todas partes. John y los demás se encuentran siguiendo a la misteriosa chica que fue enviada por el doctor Krause. A través de callejuelas y desviaciones al fin logran observar el segundo escondite de Krause desde la lejanía; el cual es un gran edificio que aparentemente se encuentra en construcción, aunque la misma esta actualmente detenida según cuenta la chica, no obstante, este se encuentra ubicado a varios kilómetros de donde están ahora. La joven mujer que les guiaba se detiene por un momento.

— Deben seguirme en todo momento a donde vaya, ¿entendido? —Dice en voz de orden—. No deben cuestionar nada, solo háganlo sin importar qué.

— ¿Oye, cuál es tu nombre? —Pregunta Gladio.

— No es de tu incumbencia —Responde tajantemente—. Y no hay tiempo para charlar, debemos darnos prisa.

Gladio se limita a callar y sin más que decir, avanzan por dentro de edificaciones abandonadas, drenajes y callejones, durante varios minutos recorrieron de esta forma hasta llegar a una especie de asentamiento que bloquea el paso; se trata de varias tiendas desplegadas sobre un gran aparcamiento en el cual parece que están tratando a ciudadanos heridos, el lugar esta militarizado y claramente no pueden pasar por allí.

— No podemos pasar por allí —Recalca John—. El lugar se encuentra militarizado, nos detendrán.

— Eso ya lo sé —Dice la chica—. Tendremos que tomar un atajo, síganme.

Todos le siguen hasta llegar a una división amurallada, el camino que tomarían ahora llevaba por un sector desolado y protegido.

— ¿A dónde lleva esto? —Pregunta Gladio.

— Es nuestro único atajo —Responde la chica añadiendo—. Aunque no es el mejor, debemos tener cuidado de ahora en adelante. Pues este sector de la ciudad sucumbió rápidamente al virus y hasta ahora según se sabe no se ha podido limpiar la zona debido a las fuertes concentraciones de infectados que rondan el área, algunos incluso alegan haber visto a una especie de enorme monstruo mutado rondando por el área.

Todos se encuentran inquietos con la idea de pasar por allí, pero debido a las circunstancias y careciendo de tiempo prefieren arriesgarse y se adentran al lugar escalando los muros a través del techo un edificio. Luego de atravesar las murallas con algo de dificultad, Gladio y sus compañeros por fin están dentro del peligroso sector por el cual deberán pasar para llegar a su destino. Mientras avanzan por los apartamentos John se percata de que varios infectados rondan por la zona en grandes grupos lo cual puede ser peligroso si continúan, pero, la prioridad es llegar al laboratorio y mientras se mueven por las sombras la chica quien iba de guía se percata de que tendrán que pasar por una calle grande antes de tomar el camino que les llevará directo a la guarida de Krause, sin enemigos por la zona deciden arriesgarse y moverse por la carretera principal; vehículos accidentados, cadáveres desmembrados y edificios destruidos abundan el área, el silencio estremecedor mantiene alerta a todos.

Mientras avanzan escuchan el zumbido del motor de una nave, probablemente una de los purificadores, lo cual indica que los estarán buscando, todos se mantienen alertas en caso de un posible ataque y, al poco tiempo comienzan a dispararles fuertemente mientras les persigue, todos empiezan a correr en dirección contraria a la nave, esquivando obstáculos y acabando con los infectados que se atraviesan por enfrente hasta llegar a un cruce por el cual giran a la derecha entrando en una calle sin salida, al frente se encuentra una nave estrellada la cual obstruye el camino. El sonido grave que provoca el zumbido de la nave purificadora delata que no tienen escapatoria y, a solo unos pocos pies de la nave accidentada todos toman cobertura y comienzan a idear una manera de derribar la nave; Ben dispara bestialmente intentando hacer algún efecto en el vehículo, pero sus intentos no funcionan, Gladio planea utilizar granadas u explosivos, pero su comprometida posición le impide buscar los suficientes materiales sin ser atacados directamente por la nave, algunos disparan a la nave con la esperanza de provocarle algún daño, sin embargo, no logran hacerle nada.