¿Amor o amistad?/ Jenna Ortega y tú G¡p

Capítulo: veinte.

— No saben lo orgulloso que estoy de ustedes — habló nuestro profesor jefe quien se encontraba arriba de la plataforma hablando delante de todos. Miro a unos asientos más adelante a Dylan y a Jenna sentados — No voy a negar que algunos de ustedes me hicieron el trabajo difícil, pero aún así, se lo merecen. Merecen cada cosa que hagan en su futuro, cada decisión que tomen y cada ruta que los lleve. Siempre persigan sus sueños, aunque sea muy difícil de lo lograr, jamás se rindan. No se alejen de las personas que los ama, porque cuando sea el momento más difícil de su vida, ellos estarán allí para ustedes. Muchas gracias a todos por venir este día, y gracias a nuestros alumnos de este 2022. Quiénes por fin, terminaron su año de estudio. Muchas gracias —

Todos aplaudieron haciendo lo mismo, veo como todos sacaron sus gorros y lo lanzaron al cielo escuchando sus gritos de alegría. Veía como todos a mi alrededor abrazarse mutuamente sintiendo su alegría a kilómetros. Miro entre medio de la gente que estaba reunida a Jenna y a Dylan, estos dos se abrazaban y viendo como lo hacían con cariño.

Estaba apunto de caminar hacia ellos pero una notificación llama mi atención. Al abrir la pantalla veo que era un correo electrónico, al ver de quien se trataba mi corazón se paro por unos segundos. Universidad Princeton.

– Estimado(a) (T/N) Michell Stanley Gennero. Le llamo para comunicarle que antes su solicitud que envió el 16 de octubre del 2022, ha sido aprobada. Felicidades, la esperamos con ansias.

Abro mis ojos sin poder creerlo. Lo había logrado, había entrado. Después de meses de desesperación y de duda, lo había logrado.

— ¿Te encuentras bien?

Subo mi vista y veo a Jenna enfrente de mi. Sin esperar me lanzó hacia ella y la abrazo contenta, por su parte me abraza sin saber lo que estaba pasando pero aún así lo hace. Me separó al ver que tenía una sonrisa.

— Acabo de entrar, acabo de entrar a la universidad de Nueva Jersey.

— ¿¡De verdad!?

— ¡Sí!

Solo siento el cuerpo de Jenna lanzarse a besarme no pudiendo dejar de sonreír por mi parte. Nos separamos después de unos segundos viendo su felicidad por mi, en cuanto miro detrás de la castaña veo a Dylan caminar hacia nosotros sin ninguna expresión. Desde la última pelea no nos hemos hablado, a veces lo veía en línea por WhatsApp pero sabía de alguna forma no me iba a contestar mis mensajes, así que no insistí más.

La castaña al verme complicada me agarra de la mano, entrelazando nuestros dedos. En cuanto llego hacia nosotros se sintió el ambiente incómodo entre solo nosotros, ya que los demás estaban celebrando y hablando con sus respectivos padres e  hermanos.

— Acaban.... acaban de aceptarme en la universidad — dije entre medio del silencio, Dylan mira a Jenna por unos segundos para luego mirarme.

— Te dije que lo harían, en unos años más estarán gritando tu nombre a todo pulmón cuando ganes tu primer campeonato. Y estaremos de los primeros asientos alentándote.

Al ver su sonrisa y sus brazos abrirse de par en par, sin dudarlo lo abrazo con el mismo gesto. Siento el mismo abrazo apretado y cariñoso cuando me había bajado del bus después de cinco años sin vernos. Nos separamos con una sonrisa, llevo mis manos a su rostro viendo sus sonrisa.

— No sabes como te extrañé — dije golpeando sus mejillas viendo que por su parte toma mi cabeza y nos hace juntar nuestras frente como lo hacíamos desde niños.

— Perdóname, me comporte como un idiota. Jamás quise lastimarte, ni golpearte ni......

— Dylan. Esta todo bien, olvidémonos de esto y pasemos página nueva ¿de acuerdo?. Como siempre decíamos, pasado, pasado y.....

— Y lo mal hecho, perdonado — termino la frase a lo que asiento con mi cabeza.

Siento sus manos pasar por arriba de mis hombros. Jenna por su parte nos miraba viceversa con una sonrisa, veo que camina hacia nosotros y nos abraza por unos segundos para luego separarnos subiendo su mirada.

— Ahora deberíamos ir a casa. Nuestros padres están esperándonos con una cena que está como los dioses, sin querer abrí el refrigerio y mire la comida que tenía preparada para los tres — comentó haciendo un sonido con su boca haciéndonos reír.

— ¿Entonces que estamos esperando? — preguntó Dylan mirándonos — ¡Vamos a comer! —

— ¡Vamoss! — respondió Jenna cantando, sin más Dylan deja su brazo arriba de su hermana y los tres caminamos hacia nuestros autos.

Quien lo diría, los tres juntos después pasar unas semanas más intensas de toda mi vida. Pero eso no importaba, ahora estábamos los tres, libre de la escuela y con un futuro prometedor.