Lo se, me tarde.
Pero me da igual.
Aquí traigo un capítulo que no tiene nada que ver con la historia que estoy contando, o tal vez si.
Que lo disfruten.
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Loid estaba leyendo el períodico mientras descansaba en el sofá de su hogar.
A su lado estaba yor la cual descansaba su cabeza en el hombro del rubio.
Y justo delante de ellos estaba Anya la cual estaba pasando el rato con sus juguetes.
Faltaba menos de un día para que comenzara la Navidad, y Loid estaba relativamente relajado.
Fue un año algo ajetreado por todo lo sucedido, pero al menos iba a terminar bastante bien.
Logró avanzar en su más grande misión, aunque sabia que esto sólo era solo el comienzo de lo que se estaba por aproximar.
Logró que su falsa familia aún siguiera unida, así que no había mayores complicaciones.
Anya afortunadamente logró pasar de años escolar, así que podia tomarse la libertad de descansar.
Y con yor.
Ella tal vez fue su mayor problema por así decirlo.
Fue la causante de que sus sentimientos volvieran a relucir.
Después de las incontables muestras de afecto que recibió por parte de ella, como el buen trato a lo largo de estos meses, provocó en el ese deseo de volver a sentir el amor.
Claro que aún mantenía su actitud profesional a la hora de operar cualquier misión extra que se le imponga.
Pero eso no quitó el hecho de querer disfrutar de el nuevo romance en el cual estaba viviendo.
Yor le declaró sus sentimientos en algún punto de su vida en donde se veía vulnerable, y el los aceptó, de la misma forma en la que ella aceptó los suyos.
Ahora se podía decir que eran una pareja oficial, aunque no se sentía muy diferente a como eran antes.
Lo único que cambió fue las muestras de afecto.
Yor era una romántica a palabras de Loid, y aunque el no fuera indiferente a dicho romanticismo, debía de decir que el no era fanático de ello.
Se limitaba a darle besos únicamente en la mejilla en las mañanas y antes de salir a trabajar como "psiquiatra" pero con yor era diferente.
Ella si se tomaba la libertad de darle besos en la boca siempre que podía.
Le gustaba estar abrazada de su brazo siempre que descansaban en casa o bien, cuando salían de paseo.
Incluso dormían juntos con más frecuencia, a excepción de los días en los que el hermano de yor iba a visitarlos a su casa.
En esas ocasiones, Yuri se ponía muy intenso con ambos, y les exigia no ser así de afectuosos delante de él, y tampoco cuando el estuviera lejos de ahí.
A Loid en particular no le molestaba, pero a yor si parecía fastidiarle eso.
No lo reflejaba con sus palabras o sus acciones, pero podia ver en los ojos de ella esa furia acumulada cuando Yuri le pedía que no estuvieran juntos.
Aunque de poco o nada servían las exigencias de Yuri ya que a partir de media noche en adelante, yor se escabullia por las ventanas para poder entrar a su habitación.
