-Un lugar embrujado-

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Sacado de My Little Pony, tienen que saber que esa serie mi difunta hermana y yo la amábamos, dejamos de verla por un muy buen tiempo, pero he estado viendo unos capítulos estos días y me trae lindos recuerdos de la primaria, ay.. cuánta nostalgia... En fin, no vine aquí a desahogarme, vine a hacer de este episodio algo gracioso para estos chicos!!! Jalsjsks >:D

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Octavia se encontraba en la biblioteca del palacio, yacía allí desde hace como dos horas buscando un buen libro con el que alimentar su cabeza, pero simplemente era inútil, pues había leído casi todos desde que aprendío a leer, y "casi" todos, porque el resto estaban en otros idiomas que solo su padre conocía y ella aún no los había aprendido, por desgracia.

-¡Agh! -toma el libro que había abierto y lo lanza a la pared

Sin darse cuenta que el diablillo de más confianza pasaba por allí y casi se lo tira a la cabeza, sobresaltándolo.

-Mh, ¿Sucede algo, princesa? -se acerca de inmediato a ella

La lechuza adolescente suspira con hartazgo.

-He revisado cada libro en esta biblioteca, Pringles, ¡Y no hay ninguno que no haya leído antes! Además, aparte de que no me llaman la atención, necesito uno que hable de leyendas o esas cosas misteriosas -suelta otro suspiro, pero esta vez de cansancio- no entiendo porque papá no ha mandado a que llenen está biblioteca de libros nuevos y mas interesantes...

-Quizá sea porque ya los estantes están completamente llenos, princesa -respondió el diablillo mayor, que habia escuchado la queja de la chica con suma atención- y, con respecto a su molestia, creo que se que pueda interesarle, sígame, por favor

Octavia lo miraba, completamente intrigada, así que sin perder ni un minuto más, fue de inmediato tras él.

-¿A dónde vamos, Pringles? -su curiosidad no pudo ser soportada

Pringles río suavemente.

-Verá, hay un libro que su padre tiene reservado para sí mismo, claro, él no quiere que nadie más sepa y me lo dijo muy claro, pero... Usted es su hija, así que no veo el problema -le da una pequeña sonrisa mientras la dirige al despacho de su padre

Octavia asiente y le devuelve una pequeña mueca que daba a entender que era una media sonrisa, y su curiosidad solo aumentó.

¿Que clase de libro tendría su padre para que pudiera que nadie más lo supiera?

Tenía que tenerlo entre sus manos, y leerlo, por supuesto.

El pequeño diablillo sacó un manojo de llaves y, uno segundos después de buscar la indicada, se la dió a Octavia.

-Creo que yo no soy el indicado para entrar al despacho del señor Stolas, pero usted si, princesa

-Claro, lo haré -tomó la llave que Pringles le dió y de un movimiento, abrió la puerta de la oficina de su padre- está muy... Ordenado... Oye Pringles, ¿Seguro que papá no está? -frunce el ceño, algo preocupada de ser descubierta

-Seguro, princesa

-y... ¿Dijo a donde iría? -hace una mueca, creyendo tener la respuesta a su propia pregunta

Y al ver la mueca de Pringles, supo que su idea era correcta.

-Él.. dijo que estaría ocupado con el señor Blitzø..

-Cómo casi siempre... -murmura de mala gana- de todas formas, gracias por esto, Pringles. Y descuida, no le diré a papá que tu me dijiste y trajiste aquí, en caso de ser descubierta, claro. Y voy a cerrar muy bien al salir -le da una leve sonrisa

Drabbles/One Shots StolitzøDonde viven las historias. Descúbrelo ahora