Accidental Pregnancy

3. Monterey

Aldo y Roberto llegaron a Monterrey. Aldo le muestra la casa a Roberto, es acogedora, con dos recamaras en el segundo piso, un pequeño patio en el que dejan a Molly para poder seguir con el tour de la casa. La sala y la cocina comedor no son muy grandes. La mayor duda de Roberto es motivo por el cual Aldo compró una casa en Monterrey. Su familia es de Aguascalientes. Nada lo trae a vivir aquí.

Roberto fue a su cuarto dejando su maleta para ver el cuarto de paredes. Tiene una ventana que deja entrar la luz natural de afuera, a un lado un armario donde puede guardas sus cosas y una base para cama. Al no estar preparados para recibir visitas por suerte tiene la base, pero no hay colchón.

- Tengo que comprar un colchón. - Dijo Roberto dejando su maleta aun lado de la cama y se sienta sobre la cama. El joven embarazado ve su celular. Roberto ve las historias de Barca viendo que está fuera comprando. Se lleva la mano debajo de su vientre tocando a su bebe. Sintió que se movió un poco. - Todo está bien, papi te quiere.

- Espera. - Roberto desde su cuarto escuchó la voz de Aldo algo apresurado. Se le hizo muy extraño ese grito. - Aguanta.

Roberto baja las escaleras con cuidado. No sabe quien entró a casa y si es alguien peligroso debe tener cuidado. Se quedó pegado a la pared agachado para no ser visto pero poder ver porque gritó Aldo.

- Osvaldo. Osvaldo espera. - Dijo Aldo mientras el alto chico no podía dejar de besarlo.

Roberto no podía creer lo que ve. El chico alto estaba besando y manoseando a Aldo de una forma muy caliente y apresurado. Estaba tocando el pecho y la espalda de Aldo mientras con la otra mano sujeta su nuca para que no se quitase. Aldo intentaba separarse pero no podía sus manos estaban en el pecho de Osvaldo y El Mariana en lugar de pensar que Aldo lo estaba separado pensaba que Aldo estaba manoseándolo.

- Ya te extrañaba un chingo. - Dijo El Mariana llevando a Aldo al sillón y sentándolo. Osvaldo se quito la camiseta mientras lo sigue besando apasionadamente. No quería dejar de besar a Aldo. Osvaldo está demasiado caliente que se sienta sobre las piernas de Aldo y comienza a moverse haciendo un rose entre la pelvis de Aldo y sus posaderas. - ¿También me extrañabas papi?

- Osvaldo. - Dijo Aldo aun respirando con mucha fuerza. - Te voy a romper.

Roberto está todavía mas sorprendido porque no esperaba que Aldo fuera el activo. Osvaldo solo sonrió ante tal respuesta y siguió meneando su cadera una y otra vez sobre las piernas de Aldo mientras lo vuelve a besar con fuerza. Aldo metió su mano dentro de los pantalones del alto de piel blanca. Roberto sabia que todo va a subir de nivel así, no quiere escuchar a Aldo y Osvaldo teniendo sexo. Así que volvió a subir las escaleras agachado para no ser visto.

- ¡Aldo muchas gracias por...! - Dijo Roberto fingiendo que acaba de bajar y encontrar a ambos teniendo relaciones. Aldo empuja a Osvaldo haciéndolo caer de culo sobre el suelo. El alto se pone se cubre con su camiseta.

- ¿Qué hace aquí? - Dijo el alto colocándose la camiseta y abrochando su pantalón. Aldo intentaba explicarle pero lo primero que hizo El Mariana ya estando vestido fue a ver el vientre de Roberto. Cuando levantó la camiseta de Roberto se puso mucho mas blanco de lo que ya es. - No mames Aldo. ¿Qué pedo con esto? ¿Me engañas cabron? Te trajiste a este wey así porque...

- Es de Barca. - Dijo Roberto a lo que Osvaldo se queda aun mas pasmado caminando hacia atrás. - Es larga historia, pero el bebe es de Diego. Todavía no lo sabe, tampoco quiero que lo sepa o que más gente sepa. Te lo digo a ti Osvaldo porque sino lo hacías ibas a matar a Aldo.

- Cuando un docel está embarazado necesita del padre, quise que mudara con nosotros para que viviera aquí. Quizás Diego no se entera, pero va a necesitar de pasar un tiempo con él. Puede morir si no están juntos.