Accidental Pregnancy

7. Viaje

El camino a su casa era largo, Roberto estaba nervioso, el chico esperaba poder llegar y descansar en su casa. El largo viaje en auto fue algo que lo cansó bastante. Tuvieron que hacer varias paradas para descansar, igual por el viaje se quedaron a dormir en un hotel de paso.

No había habitaciones individuales, así que se quedaron a dormir en una habitación con dos camas. Los chicos bajaron sus maletas y las dejaron en el cuarto, también de colocar un seguro extra para la puerta para que nadie pudiese abrirla, tienen mucho cuidado sobre la puerta. 

- Báñate tu primero pa. - Le dice Osvaldo a Roberto, pero el embarazado sigue revisando algunas cosas en su maleta. 

- Metete tu primero, tengo que buscar algo en la mochila. - Dijo Roberto viendo esa mochila que cargaba. 

- De acuerdo, no me tardo. - Dijo El Mariana para tomar su toalla e ir a darse una ducha. 

El embarazo voltea a ver a cama donde dormiría Osvaldo viendo que cambio las cobijas con unas que ya traía en el carro, igual él había traído sus propias cobijas para no dormir en las del hotel. Le daba un poco de asco dormir esas camas de hotel. De su mochila maleta saca aquella cobijita de burrito y el peluche de Bodoque para que el bebe no extrañe demasiado a su padre mientras está lejos. Lo mete de bajo de su cobija para ocultarlo del docel con quien baja. 

- Mien, olvidé la pijama. Lo siento. - Dijo Mariana saliendo en bóxer. 

- Wey ambos somos hombres, tenemos lo mismo. - Dijo para despues irse a duchar. 

Roberto salió con una camiseta ancha y ropa interior. Roberto se ve al espejo, intenta disimular todo el dolor que siente dentro de su corazón para que Osvaldo no sea capaz de verlo.  El chico sale y se encuentra con Osvaldo que ya parece haberse dormido, estaba completamente estirado en esa cama y sus talones quedaban de fuera. Roberto al verlo solo va a su cama para dormir, se envuelve en esa cobija y abraza aquellos regalos que le dio Barca. Abrazar aquellos objetos le daba un poco de tranquilidad, pero de todas formas sentía que el niño estaba inquieto. Rueda en la cama intentando encontrar una postura que pueda calmar al bebe, pero este se mueve mucho.

- Ya wey, duérmete. - Dijo colocándose boca arriba y acariciar su vientre. Bajo un poco su ropa interior y levanta su camiseta para poder acariciarlo con calma. 

- ¿No puedes dormir? - Pregunta Osvaldo viendo el que el chico se había levantado. 

- Este niño está bien inquieto, no me deja dormir el wey.

- Hey no le digas wey al bebe. - Dijo Osvaldo, le alto chico camina a la cama de Roberto. Se sienta en la cama y coloca su mano sobre el bebe. De inmediato aquel movimiento del que Roberto se quejaba cesa dejando al embarazado sorprendido. - Papi tienes que dormir. Ya es noche y tu papá tiene que dormir. 

- E wey se calmó. Se quedó quieto. - Dijo Roberto a lo que Osvaldo se pone de pie. El chico despega la mano y da un beso al vientre, pero al irse aquel pequeño vuelve a ponerse inquieto. - Osvaldo se volvió a mover. 

- Ay papi. - Dijo Osvaldo que va a la cama de Roberto para dejar su mano sobre el vientre y hacer movimientos circulares sobre el vientre. El alto joven estaba tan cansado que comienza a cabecear y dormirse ahí sentado. 

- Osvaldo acuéstate aquí.

- No wey, te voy a estorbar. 

- Wey si no lo haces el niño no me dejará dormir. Vente y acuéstate. Sino le va a hacer daño al bebe. 

Osvaldo aun dudoso se acuesta en la cama, tocando con una de sus manos el vientre de Roberto. El amor que le tiene Osvaldo al hijo de Roberto era tan puro que hace que el bebe se calmara como si del padre se tratase. Osvaldo de verdad se había encariñado de aquel pequeño bebe e incluso siente celos de Roberto, debido a que era algo que el deseaba, tener un hijo y criar a un pequeño como lo hará Roberto.