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LOVE SUSPIRO LEVEMENTE AL MISMO tiempo en el que se disponía a recoger parte de la mugre de su roomie. Estaba agradecida de tener una amiga y compañera de cuarto, pues por lo que sabía, habían muchas personas en Nevermore que ni siquiera hablaban con la gente que convivían. Aun así, era bastante cuestionable como Enid parecía esforzarse por mantener todo un caos en su lado de la habitación.
Estaba acomodando el cuarto debido a que la directora les dio aviso de que una nueva estudiante se integraría al ciclo escolar y que el lugar en donde pasaría todos los días iba a ser en la residencia Ofelia, por lo tanto, el cuarto que estaba dividido en dos, ahora se tendría que ver en la obligación de ser dividido en tres.
Love y Enid decidieron que para darle una mejor hospitalidad a su nueva roomie, se le iba a otorgar la mitad del cuarto, dejándolas a ambas juntas en la otra mitad. La Grimes y la Sinclair tenían vibras bastante distintas, pues mientras que la rubia era puro color vibrante, la castaña prefería irse por los colores pasteles.
Con pesadez se tiro a la cama que ahora se encontraba pegada a la pared que antes era de Enid. Admiro con una sonrisa burlesca al ver como la habitación había quedado dividida en tres partes bastante desiguales; una parte era colores vibrantes, la otra era blanca y rosada pastel y la otra estaba completamente vacía (y marrón).
La puerta se abrió de golpe, mostrando como una mata de pelo rubio caminaba hasta llegar a su escritorio, en donde abrió con furia la laptop.
—Hola, Enid. Si claro, de nada, ya se que soy la mejor amiga del mundo por limpiar tu mugre.— se contesto a sí misma con sarcasmo, haciendo que la nombrada la mirara mal.— ¿Qué te pasa?
—Nada.
—Si claro, puedo ver un aura negativa alrededor tuyo y me está haciendo doler la cabeza, así que relájate.— ante lo dicho paro de golpe.— Espera, ¿es un aura negativa por algo amoroso?
El don de ver auras se le habia sido otorgado cuando el espiritu de cupido comenzo a habitar en ella. La mayoria de las veces funcionaba especialemte cuando estaba relacionado con algo amoroso, así era como su cupido podía darse cuenta de que se podría acercar el uso de una posible flecha, sin embargo, con el paso del tiempo, Love se volvio capaz de leer las auras de los demás.
—A veces se me olvida que puedes hacer eso.; se rio la loba mientras se giraba con una sonrisa hacia Love, haciendo que esta la mirara estupefacta debido a su cambio repentino de humor y como aquella vibra negativa desaparecía.— Es Ajax.
—¿Otra vez?— preguntó con irritación. Enid era su mejor amiga y le molestaba un poco verla enfadada por culpa de Ajax.— A veces me pregunto si es tonto o si actúa así porque le gustas.
—Tú podrías decirme si Ajax gusta de mi.— se emociono de inmediato la rubia.— O quizás, influenciar una de tus flechas y que mágicamente caiga sobre Ajax y sobre mi.
