Enferma

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Sidney

Un enfermo es cuando un persona puede padecer un dolor, mareo etc...

Todos lo hemos tenido, a veces puede ser leve o muy fuerte pero cuando era una adolescente me enfermé, pero a mi parecer me dio muy fuerte.

Primero amanecí con tos, después me empezó a doler la espalda y por último me empezó a sentir algo cansada.

Quería irme de la escuela, pero como mis padres estaban ocupados así que tenía que aguantarme hasta la hora de la salida.

Cuando vinieron por mi me preguntaron cómo estaba, pero les dije que me sentía mal y pues como padres se empezaron a preocupar.

Me llevaron al doctor después de comer algo, me recetaron medicamento y cuando estuve ahí me espeso a dar fiebre.

Después comí algo pero me callo mal y tuve que vomitar, luego me acosté ya que como dije me sentía cansada mis padres y mi hermano menor estuvieron ahí para cuidarme para que no me faltara algo.

Un rato mejore ya no tenía tanta fiebre ni dolor de estómago, pero cuando dormí empezó mi dolor otra vez.

Así que no pude ir a la escuela, mis padres se pusieron de acuerdo para cuidarme y al final me cuido mi padre.

- ¿Quieres que te prepare un té? - decía mi padre.

Yo estaba en mi cuarto acostada en mi cama, tapada con cobijas, además tenía una caja de pañuelos para limpiar mi nariz y una taza de agua caliente.

- Si no es molestia - empecé a toser. - ¿Porqué tenía que pasarme esto? - me empecé a quejarme.

- Temporada de frío, además por andar descalza -

- Que no estaba... agh...olvídalo no quiero empezar una pelea que implique hablar - tosí de nuevo. 

- Ahora vuelvo, si necesitas algo háblame - se fue.

- Como si tuviera la fuerza para hablar - lo dije susurrando, luego escuche que abrieron la puerta y justo para mi suerte era mi hermano London.

- ¿Te encuentras bien, hermana? - se acercó dónde estaba.

- ¿Tú que crees? - volteo para otro lado.

Mi hermanos no dijo nada y nos quedamos callados por un largo rato hasta que decidí romper el silencio.

- ¿Por qué estás aquí? -

- Para ver que te encuentre bien -

- Como sea, solo no me hables tanto no estoy de buen humor -

- Está bien - se sentó en una silla que tenía cerca de mi, estuvo varios minutos hasta que llegó nuestro papá.

- Ten tu té, mi oveja - me acercó el té, pero tuve que levantarme para poder tomarlo.

- Gracias, papá - lo empecé a tomar y me lo acabe en unos segundos.

- No hay problema, sabes que siempre te cuidare mi pequeña ovejita - deje que terminara de hablar para darle un abrazo, que me correspondió al instante.

- Te quiero - lo dije que n su hombro y el solo me abrazo más fuerte.

- Igual que yo - me acaricio mi cabeza y me dio un beso en mi cabeza.

- También te quiero hermana, y también te cuidare - mi hermano se unió al abrazo, no dije nada solo disfruté el momento...





- Regalo 2
- Gracias por leer
- Espero que les allá gustado
- Está basado en lo que me pasó el 7 de diciembre, ya que estuve enferma como dos semanas y media por eso no actualice, pero ya me encuentro un poco mejor
- Un problema que tuve al escribir esto es que ya tenía la historia, pero como no se me guardó pues al tratar de entrar en mi teléfono no se veía y tuve que volverlo hacerlo


Nos vemos...

Carmen Sandiego AU - One ShotDonde viven las historias. Descúbrelo ahora