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La peculiar personalidad de Anatema Device le provocaba cierta inquietud a los pobladores más intolerantes del lugar. Estaban en lo cierto al suponer que ella era una bruja y eso ponía alerta a algunos vecinos de mente cerrada pese a ser una joven agradable.

Recientemente le había sido dada una serpiente a su cuidado, una pitón real con tonalidades ligeramente amarillas, negras y cafés. Eso solo podía empeorar la imagen que la gente tenía de ella.

Honestamente, Device estaba en contra de las mascotas exóticas pese a que eran de su interés, pero no le quedó de otra más que cuidarla, podía quizá entregarla pero definitivamente no confiaba en cualquier asociación que dijera proteger a los animales.

Consiguió lo necesario para que estuviera en un ambiente ideal y la trasladó del pequeño contenedor dónde estaba enrollada a su nueva casa de cristal. Al inicio se mostró un poco a la defensiva pero en cuanto intentó tocarla se retorció y sacó la lengua dramáticamente, fingió su muerte.

Supuso que el animal no quería tener ninguna clase de contacto por el momento y respeto su decisión.

Lo que más le desagradaba a la joven era alimentar al reptil, odiaba ver cómo devoraba roedores pero comprendía que era parte de su estilo de vida y aunque lo detestaba, terminó por acostumbrarse.

Un día el hijo del matrimonio Young; Adán y su grupo de amigos autoproclamado "Los ellos", fueron a casa de Anatema para que les obsequiara viejas y entretenidas revistas de dudosa veracidad.

- Ah, hola niños. Supongo que vienen por las revistas, ¿verdad? Pasen. - Se hizo a un lado y los cuatro niños entraron a su casa.

Pepper preguntó sobre la extraña pecera que en lugar de estar llena agua y peces tenía hojas, ramas y luz.

- Eso... Ehm, fué un regalo inesperado. - Se acercó y los invitó a hacer lo mismo. - Se llama Crawly, es una pitón.

- ¿No es venenosa?

- No, es constrictora. Significa que en lugar de envenenar a sus presas, las asfixia hasta matarlas.

- ¿Puedo tocarla?

- No creo que le guste que la toquen, Brian. - Mencionó Adán mientras se acercaba al cristal y pudo ver cómo Crawly intentaba subir por el cristal que estaba del otro lado.

- Si, no es muy sociable. - Afirmó Anatema.

Expresó su molestia sobre recibir a Crawly como un obsequio y al terminar les entregó las revistas a los niños. Antes de irse, Adán se percató de un libro cerca de la salida y lo tomó mientras Anatema caminaba hacia la puerta para despedirlos.

- "Moonchild". - Leyó intrigado. - De Aleister Crowley, creo que leí algo sobre el en una de las revistas.

- ¿De verdad? Recién lo compré, si quieres puedes llevártelo y leerlo.

El reptil escuchó con atención y decidió que "Crowley" sonaba mejor que "Crawly", o que al menos llamándose así no se sentiría sumiso.

No quería ser una mascota, quería ser un animal temido, uno que cazaba sin la ayuda de pinzas... Aunque no se quejaba, le gustaba deslizarse sobre la placa térmica que lo mantenía caliente.

Anatema regresó a dónde se supone que estaba Crawly, pero se había escapado.

- ¡Maldición!... ¿Crawly?

Estaba en el segundo piso, debajo de su cama. Fué rápidamente interceptado por su dueña y aunque el aseguraba haber sido discreto, la nueva alfombra de terciopelo debajo de el lo había delatado, había una larga y delgada silueta que mostraba su ubicación.

Anatema tomó una canasta y la acercó hacia la serpiente. Segundos después, la sujeto de la parte media de su cuerpo y antes de que intentará atacarla, logró echarla dentro.

El reptil dentro de la canasta estaba más que desconcertado, incluso parpadeo un par de veces antes de entender que había sucedido.

Todo fue demasiado rápido para el y ahora se encontraba de nuevo en su casa de cristal.

- Es hora de alimentarte. - Acercó unas pinzas con un ratón muerto en las puntas.

El abrió la boca y le dió una gran mordida al roedor, luego enroscó su cuerpo al rededor de su presa y bueno, la devoró.

Una semana después, Crawly debía ser alimentado de nuevo pero, ¿cuál fué la sorpresa? Una nota pidiendo disculpas y ofreciendo un hámster vivo para reemplazar la rata muerta que debía llegarle.

Tan dulce que podría comerte. [AziraCrow] [Historia Finalizada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora