Partimos a una nueva ciudad para seguir con nuestra búsqueda; siento que, mientras más se acerca el día, más me sentía inseguro. No dejaba de pensar cómo moriría en manos de mi demonio, cómo vendría a robarme el corazón y mi existencia desaparecería de la faz de este mundo cruel.
Incluso el comportamiento de Koujaku comenzó a cambiar, parecía estar sufriendo, pero cada vez me decía: ¨no te preocupes, estoy bien¨ y sonreía. Por un momento pensé que él no confiaba en mi, pero supe que me decía aquello para no hacer sentirme mal.
Llegábamos a una nueva ciudad, y ésta parecía diferente a las otras que habíamos visto. La mayoría de las personas vestían túnicas oscuras, algunos usaban máscaras aterradoras y tenían una anatomía GRANDE. Parecía estar en una ciudad de gigantes.
Entramos a una tienda para preguntar dónde podíamos pasar la noche.
-Disculpe, ¿Sabe donde podemos encontrar un lugar para pasar la noche?
-Ah si, un momento...
En ese momento, un joven salió a atenderme, tenía una estatura normal, cabello rubio, ojos verdes y esa mirada inusual. Me alivié también por que me parecía más normal que las personas que vimos afuera.
-Pues yo puedo ofrecerles un lugar para que pasen la noche.
-¿A cuánto sería una noche?
-150 tokens por cada uno.
-Mmmm... estamos a medias... ¿qué hacemos Kou? - miré a Koujaku preocupado.
-Veremos si otros lugares nos deja más cómodo - miró hacia el joven - veremos otros lugares, en caso de que no encontremos, volveremos.
-Esta bien.
Fuimos a otras tiendas a preguntar los precios para las posadas, pero era demasiado para el presupuesto que teníamos. A hincapié volvimos a la tienda del joven; mientras volvíamos me tropecé con alguien.
-Di-disculpe, no presté atención por dónde pasaba - dijo el joven cubriéndose el rostro con la capucha que llevaba.
-No te preocupes, también fue mi culpa, no vi que pasabas a mi lado.
-Bueno, disculpe la molestia, hasta luego.
En un instante, cuando el joven pasó a mi lado pude ver claramente su rostro. Tenía unas marcas en su rostro, ojos dorados, y unas orejas puntiagudas en su cabeza...
(¿Qué es eso?), me pregunté mentalmente, (¿Eso eran orejas no...?). Después de que el joven se haya ido, miré a Koujaku. Él también estaba sorprendido.
-¿Has visto eso Kou?
-Sí... Esta ciudad no es normal... Volvamos a la tienda.
Volvimos a la tienda del joven y decidimos pagar su oferta. En toda esta ciudad, éste era el único precio razonable. El joven nos mostró el camino hasta el cuarto y nos entregó la llave.
-Aquí está la llave del cuarto, cerraré la tienda a las once así que no lleguen tarde.
-Gracias, este... ¿cuál es tu nombre?
- Me llaman el mago verde, pero puedes llamarme Noiz...
-Gracias, Noiz. Vamos Kou, debemos comprar algo de comer, mi estómago no aguantará por mucho tiempo.
-Sí, esta bien.
Nos dirigimos al mercado para comprar provisiones para el viaje. Y en eso, vimos a una muchedumbre en el medio del camino. Nos acercamos para ver qué era y vimos al joven que me había topado en la mañana. Estaba siendo golpeado por unos hombres.
-H-hey !! - entré en el pleito para detenerlos - Dejen de golpearle.
-¡¡A-Aoba!! - gritó Koujaku.
-¿Y este mocoso?¿también quiere te den una paliza?
El hombre levantó la mano y me preparé para recibir el golpe, cuando en joven salió frente mío y le dio una mordida en su brazo.
-¡¡Ma-maldito!! Por fin decidiste sacarte la capucha, ¿no?
-Déjalo en paz, sólo vete antes de que inyecte el veneno de mi colmillo.
Los hombres que lo molestaban, entraron en pánico y decidieron retirarse. El joven me miró preocupado y dijo:
-¿Estás bien?¿Te han hecho daño?
-No, gracias a ti.
-¡¡Aoba!! - apareció Koujaku alterado - me preocupaste, entrar así a las peleas...
-Lo siento... no pude evitar ver cómo abusaban de él - miré hacia el joven.
-Realmente se lo agradezco, si no fuera por usted tendría la boca rota y las orejas quemadas... Me llamo Ren, un gusto en conocerte - estiró su mano hacia mí.
-Igualmente - tomé su mano y nos dimos un apretón.
-¿Qué tal si vamos a tomar unas bebidas? - sugirió Ren moviendo las orejas.
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Blue Demonflower
FanficUna ship Aoba x Koujaku. Esta historia sucede mucho antes de la actualidad en el lejano desierto. Aoba, es un joven bailarín viajero, que se gana la vida bailando en las calles, tiene una marca de una flor en su pecho por una maldición cuando nació;...