ヾ*'𝗨𝗻𝗮 𝘃𝗶𝗱𝗮 𝗰𝗼𝗻 𝗱𝗲𝗺𝗼𝗻𝗶𝗼𝘀/～♡

Lo siento.

Mukago se quedo en silencio, con los ojos abiertos como platos ¿Que debía de contestar? Inosuke solo tenía seis años.

-E-eh.. pues verás..- la chica de los cuernos se puso nerviosa, no sabía la historia de la madre de inosuke.

-T-tu si tenías una madre pero.. el-ella.. falleció por una.. ¿..enfermedad..?- había empezado a sudar demasiado.

Inosuke la miró, y suspiró. -Hubiera querido conocer a mi mamá..-

La chica de los cuernos dejo de sentirse nerviosa, sonrió cálidamente. —Estoy segura de que a tu madre también le hubiera gustado conocerte..-

Los ojitos de inosuke brillaron como nunca. —¡Seguramente mi mami fue una mujer muy hermosa y fuerte!-

—Seguro que si- mukago le acarició la cabeza con cariño al niño.

Douma escuchaba todo desde el otro lado de la puerta, con una mirada escalofriante, sus ojos no brillaban. Estaba recordando el tiempo que pasó con Kotoha... Antes de matarla.

Flashback

—Kotoha-chan es la chica mas linda que he conocido- un coqueto Douma peinaba con sus dedos el lacio cabello azabache de la muchacha.

—Me halaga mucho Douma-san- dijo sonriendo la chica.

—¿Nunca me dejaras verdad? Tu sabes que considero a los dos como parte de mi familia..- chantajeó el de ojos arcoiris a la de puntas azules.

—Mmm.. no, ¡nunca lo haré Douma-san!- la muchacha río mientras se daba vuelta y abrazaba al mayor.

....

—DIJISTE QUE NO ME ABANDONARÍAS..- Douma la fulminaba con la mirada.

-¡Eres un monstruo aléjate de nosotros! - Kotoha corre con velocidad por el bosque, sus pies duelen al igual que sus pulmones, se aferraba al cuerpo de su pequeño en brazos, protegiéndolo a toda costa.

Douma gruñe con fuerza ante esto, siguiéndola a paso lento hasta el borde del acantilado, sabiendo que la muchacha no tiene salida. -Me lo prometiste, creí que eras alguien que cumplía sus promesas querida.- Douma se acercó, y de un movimiento rapido, cegado por la ira de ser traicionado, cortó la yugular de Kotoha.

La sangre brotó con exageración, el cuerpo de la mujer cayó de rodillas aun con el cuerpo de su bebé en brazos, el cual debido ala sacudida, ahora se encontraba llorando. Los ojos verdes de la muchacha estaban llenos de terror y arrepentimiento, ella comenzó a llorar.

-Señor.. Douma.. cuide de mi pequeño inosuke..- la mujer se desplomó.

El demonio miró el cuerpo de quien fue en algún momento su amada, de quien iba a ser su mujer y la madre de el precioso hijo que estaban cuidando y protegiendo en conjunto. Una pequeña gota salada se resbaló por su rostro, agarró a su hijo que lloraba, besó sus largas pestañas. -Ahora solo somos tu y yo, mi querido y amado inosuke..-

El pequeño sonrió al ver el rostro de quien seria su padre de ahora en adelante.

"Fin del Flashback."

Douma entró a la habitación sin tocar, ignoró por completo a la inferior y corrió a abrazar a su hijo, aferrándose a su pequeño cuerpo.

Inosuke lo miró con duda y el ceño fruncido, empezandose a quejar como cualquier niño haría por la fuerza ejercida en el abrazo. Finalmente resignado y con una sonrisa, devolvió el contacto.

—Lo lamento Inosuke.. perdóname..- La superior 2 se mostró débil, era su hijo después de todo..

El de ojos esmeralda se quedó en silencio.
—No comprendo, pero... te perdonó, papá.-

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